"La economía de Latinoamérica ha tocado fondo", al menos eso considera el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Luis Alberto Moreno. También advierte de que los actuales "vientos de proteccionismo" deben obligar a Latinoamérica a integrarse "mucho más" y reconoce que "el peligro" de que éstos desencadenen guerras comerciales "siempre existe".


Desde la sede de la entidad en la capital de EEUU, Moreno ha asegurado a la agencia Efe que "el peligro" de que se desencadenen guerras comerciales "siempre existe", algo que los analistas ya han advertido tras las insinuaciones por parte de Trump de imponer un arancel especial a los productos procedentes de países como México y China, además de su promesa de renegociar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) con México y Canadá.


El presidente del BID reconoce, una semana antes de la asamblea anual del organismo en Asunción (Paraguay), "el cambio de coyuntura global" respecto a los tradicionales llamamientos al libre comercio internacional, con la agenda de nacionalismo económico impulsada en Washington con la llegada al poder de Donald Trump y la victoria de la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE).



Tras dos años de recesión en la Latinoamérica, y el esperado regreso al crecimiento positivo en 2017, Moreno destacó que "si tenemos espacio para crecer, pasa por integrarnos más", al remarcar que "es verdad que el volumen de comercio dentro de la región es de los más bajos del mundo".


Precisamente, el Gobierno de Brasil reduce su previsión de crecimiento para este año del 1 % hasta medio punto. Aunque insiste en que supone la salida de la recesión

La nueva proyección del Gobierno para el crecimiento del PIB del país se aproxima a la de un consenso de economistas, que esperan para este año un incremento del 0,48 %.

Brasil ha pedido ante la OMC que se eviten restricciones arbitrarias contra sus exportaciones de carne que podrían ocasionarle hasta 1.500 millones de dólares de pérdidas

Brasil calcula que puede suponer casi el 10 % de su mercado externo de carnes por la mafia que adulteraba esos productos.