"Con una cartera inferior a los 10 clientes resulta muy complicado llevar a cabo políticas de dispersión del riesgo de crédito. Por muy adecuada que sea nuestra política de credit management, un impago puede tener un efecto de mucha severidad en nuestras cuentas, tanto en lo que se refiere a la pérdida de rentabilidad como a la disminución de los ingresos", explica el director general de Iberinform, Ignacio Jiménez.
En el otro extremo se encuentra el 18% de las empresas con carteras superiores a los 100 clientes. La problemática que afrontan es justo la opuesta: aunque han logrado una gran diversificación de sus riesgos de crédito, estas empresas afrontan una importante dificultad para mantener un nivel de análisis profundo y actualizado de su cartera. Por territorios, destaca especialmente Madrid, donde el 54% de las empresas cuenta con más de 100 clientes.
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