Las bolsas de Asia han bailado durante el rojo y el negro durante toda la sesión tras los datos de empleo estadounidenses y el rebote de los precios del petróleo. Además, ha pesado sobre los mercados el nuevo plan de crecimiento económico chino. Los nuevos objetivos que salen de la Asamblea Popular china de este fin de semana incluyen un objetivo de crecimiento de entre el 6,5% y el 7% para este año. Con todo, los mercados chinos se han salvado de las caídas y han avanzado alrededor del medio punto porcentual. En el lado de los ascensos, las empresas de infraestructuras como China Railway Construction que sube hasta un 2%. Los productores de metal chinos también con fuertes repuntes. Baoshan sube un 4% y Yunnan Copper un 7%. Por cierto que, la filial financiera de Alibaba, comprará por 308 millones de dólares una participación en la firma de loterías china Agtech para impulsar su negocio de lotería en China. Esta adquisición marca su vuelta a este segmento de negocio.
Además de este objetivo de crecimiento revisado. Recogemos también del encuentro de este fin de semana las declaraciones del Ministro de Finanzas chino que alerta de los riesgos que supone el endeudamiento de los gobiernos locales en la economía. Se compromete a utilizar el alza en el techo de déficit para paliar estas amenazas.
En Japón, el Nikkei de Tokio ha cerrado con caídas del mismo porcentaje, la peor parte se la ha llevado el Topix con una bajada del 0,8% después de alcanzar las tres mejores semanas desde 2014. Los sectores más perjudicados han sido el ferroviario, el de energía y el sector de la alimentación.
Jornada en la que el comportamiento del precio del petróleo ha sido al alza. Por eso, las mineras australianas se han movido con avances. Rio Tinto ha subido hasta un 3% y Fortescue disparada hasta un 12% después de haber subido su precio por tonelada. La china Sinopec también repunta hasta el 3%. Sin embargo, en Japón Inpex y Japan Petroleum han cotizado en negativo.