Es una de las conclusiones del informe hecho público hoy por la Reserva Federal de EEUU. Y, según el documento, una de las razones se puede encontrar en el boom inmobiliario y las consecuencias del colapso del sector. Las deudas relacionadas con la vivienda se han incrementado casi un 50% para los mayores de 65 años y ha caído cerca de un 30% para los menores de 30.
Lo mismo pasó con los préstamos para comprar coches. La deuda sube aquí un 30% para los mayores de 65 años y cae un 6% para los menores de 30.
Según el informe de la Fed, en general, el mayor montante de la deuda de los estadounidenses sigue en la vivienda, con un 68% del total en 2015. Las deudas asociadas a los créditos estudiantiles ocupan el segundo lugar, con el 10%. La deuda por la compra de vehículos supone el 9% y la de las tarjetas de crédito un 6%.
Mientras, según la Reserva Federal de Nueva York, la deuda inmobiliaria ha crecido de forma moderada en los últimos tres meses de 2015. Subió en 51.000 millones, para situarse en los 12,12 billones de dólares a finales del año pasado.