El Ibex 35 cierra con una caída del 2,53% hasta los 9.810 puntos. Todo ello con un volumen de negociación que ha triplicado al habitual. En otras bolsas europeas el desplome ha sido similar. El mercado francés y el alemán han cerrado con descensos del 2,30%.
En medio de una volatilidad desmesurada, los mercados llevan dos sesiones dando tumbos y sin tener muy claro si la corrección va en serio o es pasajera. Para tratar de poner un poco de sensatez a este movimiento, cabe decir que a diferencia de otros “crashes” históricos de la bolsa, en esta ocasión no hay una noticia negativa que lo explique. Es altamente improbable que haya una recesión económica a la vuelta de la esquina, de manera que la única causa parece ser la de un mercado que trata de adaptarse a un escenario futuro de subidas de tipos de interés.
Mal día ha elegido Metrovacesa para su vuelva al parqué tras caer un 5%.
Por otro lado, Abertis ha sido otro de los protagonistas. Bruselas ha dado el visto bueno a la oferta de ACS a través de su filial alemana Hochtief y una vez conseguido, es el turno de la CNMV que podrían autorizar también el folleto esta semana o la que viene. Mientras, continúan las especulaciones sobre una posible mejora de la oferta por parte de Atlantia hasta más de 20 euros por acción.
En el resto de bolsas europeas, destaca la caída de Munich Re, que se deja un 4,7% tras presentar unas cuentas anuales que no han convencido al mercado. Recortes para los bancos como Deutsche Bank e ING que se dejan más de un 3% y BNP Paribas baja más de un 2% hoy que ha presentado resultados: beneficio neto en el cuarto trimestre baja hasta los 1.430 millones de euros, cifras por debajo de lo esperado. Sube dividendo casi un 12% hasta 3,02 euros por acción. El banco más grande de Francia ha confirmado objetivos para 2020.
El Nikkei japonés es el índice que sale peor parado en la sesión asiática
Los inversores huyen a los activos refugios, impulsado el yen y los bonos del Tesoro en una nueva jornada de caídas globales que se refleja este martes especialmente en Japón. El índice Nikkei termina la jornada con un recorte del 4,76% en 21.603 puntos, pero ha llegado a perder un 6,7% y se ha anotado su mayor pérdida de puntos desde 1990. La volatilidad del Nikkei 225 Stock Average alcanza su mayor pico desde 2013 y los recortes se extienden a todos los sectores. Los fabricantes de automóviles, financieros y tecnológicos son los que más caen, con títulos como Toyota dejándose un 4,7%, SoftBank un 7,9% o Fanuc Manufacturing un 7,8%.
En Corea del Sur, el Kospi se deja un 1,53% y cierra en 2.453 puntos, donde el sector tecnológico es el más afectado, con recortes superiores al 2%.
El S&P australiano ha terminado la sesión con un recorte del 3,2%, en 5.833 puntos. El subíndice de energía es uno de los que peor se ha comportado, con caídas del 5%, afectado también por la caída del precio del petróleo. Y en el sector financiero, entidades como ANZ o Westpac se han dejado más de un 3,5%, mientras el banco central del país ha dejado intactos los tipos de interés.
El Hang Seng de Hong Kong se deja un 4,24%, hasta los 30.879 puntos, con descensos en todos los sectores y con recortes del 3,14% en pesos pesados como HSBC o del 6% en el gigante tecnológico Tencent.
En China, Shanchai se deja un 3%, hasta los 3.381 puntos, y los mismos comportamientos se repiten en el resto de mercados. En Taiwan o Vietnam también se han visto recortes superiores al 5%.