Según el úlitmo informe del Banco de España sobre la evolución reciente del mercado de la vivienda en España, el precio de los alquileres en nuestro país ya ha alcanzado los niveles previos a la crisis.
A pesar de la subida de los precios, un 3,6% en marzo, tras la aprobación del decreto de vivienda, los jóvenes entre 16 y 29 años y el rango de edad de 30 a 44 años siguen prefiriendo el alquiler frente a la opción de comprar una vivienda. Madrid y Barcelona son las dos ciudades de España dónde más caro sale alquilar un piso.
¿Por qué están subiendo los alquileres?
Según el informe del Banco de España se debe a diversos factores económicos, fiscales y sociológicos. Los cambios en las preferencias de los jóvenes y el impacto de los cambios fiscales están entre ellos.
Respeto a los cambios fiscales, estos han influido en la preferencia de alquiler frente a compra, ya que la eliminación de la deducción por inversión en vivienda habitual y el incremento de los impuestos sobre la tenencia de vivienda y de compra han dificultado la oportunidad de tener una propia.
Según el Banco de España, tanto el reajuste de la inversión en vivienda, que ha alcanzado niveles próximos al 5,5% del PIB en 2018, frente al 12% de la crisis, como el resto de la inversión en construcción que mantuvo en los años más recientes "un peso reducido en el producto", pasando de suponer el 9,4% del PIB en 2006 al 5,1% registrado el año pasado, han influido en este comportamiento.
La compraventa no supera los niveles precrisis
A diferencia de los alquileres, la compraventa de viviendas no está pasando por su mejor momento. En el periodo de 2004 a 2007 cifra rondaba las 885.000 transacciones, esta cifra se ha reducido hasta 550.000 compraventas de viviendas, aunque sea incrementado un 10% respecto al año pasado, dista mucho de las cifras de los años anteriores.
El informe del Banco de España, apunta a que la iniciación de obra nueva también ha mostrado una tendencia de mejora, aunque "con cierto retraso", posiblemente por "el elevado stock de viviendas sin vender como resultado del fuerte incremento de la oferta durante la anterior fase expansiva, que no fue absorbido durante la crisis".
Añade, además, que el brexit ha podido influir en este descenso de compra, ya los británicos siguen siendo los compradores con mayor peso sobre el total (14%).