Sin embargo, Manuel Vilches no coincide con este planteamiento, opina que es poco accesible y que no se tiene en cuenta a los diez millones de personas que confían en el seguro privado. Aboga por la complementaridad de los sectores "somos dos grandes buques que navegan en el mismo sentido y que tienen la necesidad de navegar juntos".
De esta última opinión es Alberto Giménez (FES) que no está de acuerdo con la visión del señor Soto de la sanidad pública. Según su criterio, el sistema es poco eficiente y "o cambia o no tiene futuro". Destaca que el sector sanitario privado es un gran sector de inversión "si hay un sector que va a crear empleo y riqueza es el salud, y eso tiene que reflejarse en los presupuestos para infraestructuras".
El portavoz de Sanidad del PSOE, Jesús María Fernández, declara "no puedo estar de acuerdo en que el sistema no es eficiente, aunque hay áreas a mejorar". LLama la atención sobre la problemática de la financiación, la más baja de Europa, y aboga por buscar áreas concretas de colaboración con el sector privado.
Francisco Igea, de Ciudadanos, cree que "Hay que salir de la demagogia y orientar el sistema a la calidad", punto con el que Cristina Contel coincide. Por otro lado, Amparo Botejara plantea una cuestión en relación al detrimento del sector público frente al crecimiento del privado ¿Se trata de una relación de simbiosis o de parasitación?