El beneficio operativo bruto (ebitda) cayó un 4,2% en 2015 hasta los 900,5 millones por un aumento de los gastos operativos del 13,1% ligados a sus filiales de Andalucía y Extremadura y a los gastos para hibernar el almacén Castor.
Los ingresos operativos se mantuvieron estables en 1.221 millones de euros. El beneficio neto se situó el año pasado en 412,7 millones de euros, con un crecimiento del 1,5 por ciento, superior al objetivo de crecimiento de medio punto que se había fijado.
El endeudamiento financiero neto ha subido hasta los 4.237 millones de euros.
La demanda de gas natural del mercado nacional alcanzó los 315.236 GWh, un 4,5% superior a la alcanzada en 2014. Es el mayor incremento desde el año 2008.
Se espera que hoy su presidente, Antonio LLardén, actualice los objetivos estratégicos para el periodo 2016-2020.