Tertulia de fondos en Uno de los Nuestros con Francisco Javier Velasco, analista de Andbank, y con Alfonso de Gregorio, gestor de Trea AM.
Jerome Powell finalmente no se ha atrevido a bajar tipos, en un entorno bastante tenso, porque se ha hablado incluso de que Donald Trump se ha planteado prescindir de él al frente de la Reserva Federal. Se mantienen por tanto en la horquilla del 2,25% al 2,50%.
Powell ha hecho una demostración de independencia y se ha guardado cartuchos de cara a futuro, según explica Alfonso de Gregorio, jefe de gestión de renta variable de Trea Asset Management “aquí en Europa ya casi no nos quedan cartuchos, en EEUU todavía les quedan, la renta variable está demostrado fortaleza y todavía no era necesario gastarlos, más allá de los cabreos de Trump. Además era lo que esperaba el mercado”, añade.
Eso sí, de Gregorio reconoce que el mercado también descuenta que habrá bajadas de tipos pronto en la mayor economía del mundo. La duda está en si se bajarán un 0,25 o un 0,5%.
Eso al otro lado del Atlántico. Aquí en Europa, el Banco Central Europeo también ha dejado a la vista su postura. Mario Draghi hace unos días aseguró, en el Fórum anual que celebra la institución, en este caso en Sintra, en Portugal, que aplicarían nuevos estímulos en caso de persistir los riesgos de deflación. Además sorprendieron sus palabras porque las pronunció fuera de sus habituales ruedas de prensa tras los encuentros de la institución y porque Draghi dejará el cargo el 31 de octubre.
Francisco Javier Velasco, analista de fondos de Andbank, explica que se esperaba de Draghi que se desmarcase de la Fed, pero no ha podido ignorar la coyuntura económica. Podría en todo caso situarse en un término medio, entre la bajada de tipos e implementar otras medidas, como la herramienta de las TLTRO y la reinversión de estas inyecciones de liquidez. Velasco señala también que vamos a una “japonización” de la economía, con un largo periodo de tipos bajos o incluso negativos. “Es una espiral en la que no tienes crecimiento. Es algo que en Japón llevamos viendo durante muchos años, pero a lo que no estamos acostumbrados en Europa o EEUU. En una economía que crece sin inflación, las políticas monetarias que se pueden aplicar son muy justas”.
¿Tiene sentido pasar los tipos de interés a negativo y volver a lanzar un programa de compra de deuda? Porque según la normativa del BCE, ya no puede comprar muchos más activos.
El principal perjudicado de la política del BCE serían los bancos. Según Jorge Ufano, gestor de GPM Broker, “el dinero que tenían previsto ganar, primero de los márgenes, porque a tipo cero es difícil hacer previsiones, porque tendrían que estar cobrando a sus clientes por los depósitos y no lo están haciendo”.
Alfonso de Gregorio explica también que ahora mismo, en las últimas 65 semanas, en 63 se han dado reembolsos de fondos de equity, “no para de haber reembolsos. Te encuentras con un EuroStoxx 50 que sube un 16%, un Dax alemán que sube casi un 18% y un Ibex35 que sube un 8% y aun así sigue habiendo reembolsos, que se van principalmente a renta fija. Hay pánico sobre la renta variable”.
Como advertencias, de Gregorio explica que además los inversores tienen que aprender ahora a vivir con el Brexit y la guerra comercial, porque son dos asuntos que “van para largo”.
Fondos de Andbank Wealth Management y Trea Assent Management
Desde Andbank WM, consideran que ahora mismo la nueva revolución industrial es la inversión socialmente responsable. Por eso han lanzado un fondo mixto, que reúne estos criterios de ISR. “Hay que aplicar también criterios extrafinancieros”. Se trata del Sigma Global Sustainable Impact. “Creemos que el mundo va a cambiar, ya lo estamos viendo con la tecnología y las fintech. Por eso creemos que invertir con criterios ISR es la mejor forma de generar un impacto e influir en la economía”.
En Trea AM, nos presentan el Trea Iberia Equity. Alfonso de Gregorio explica que el año pasado lo hicieron mejor que el Ibex35 con este fondo y este año van algo por detrás. En este sentido explica que los mercados se están moviendo por los anuncios de los bancos centrales y se está dejando de lado el análisis de los fundamentales y resultados de las compañías.