El pasado 8 de noviembre, Twitter volvía a ser una empresa privada dejando de cotizar en el Nasdaq, el frenesí de estas últimas semanas dentro de la sede en San Francisco ha sido una constante. Desde la llegada de Elon Musk a la compañía ha habido despidos, renuncias y hasta pérdida de clientes.
Muchas metáforas se han hecho a lo largo de esta historia, comenzando por los Tweets del magnate sudafricano, que tras la compra anuncio que "el pájaro ha sido liberado", pues bien si tenemos en cuenta que vuelve a manos de un todopoderoso y quizás algo tirano Elon Musk, veremos si lo ha liberado o lo ha enjaulado.
En este contexto, toca hacer un repaso de la historia de esta aplicación en el mercado de valores, que desde 2013 lo que parecía un incesable rally bursátil se convirtió en un declinación constante.
Todo se remonta al 7 de noviembre de 2013, volviendo al pasado, minutos antes del toque de la campana en Wall Street. Hay estaban Jack Dorsey y Evan Williams (socios fundadores), ansiosos por refrescar sus cuentas bancarias, y no era para menos, pues una hora más tarde, el jilguero de internet se consolidaba como la segunda mejor salida a bolsa de una empresa web, con una recaudación de 1.600 millones de dólares.
El precio inicial de las acciones se fijó en 26 dólares, pasando a costar 45,1 en su primer día, lo que suponía un 73% sobre la valoración inicial.
¿Qué pasó desde aquel día?
Tras la exitosa OPV de la compañía, al siguiente año alcanzaron un nuevo reto, los 400 millones de usuarios en todo el mundo, todo un hito.
Tras esta salida todo indicaba que el rally iba a continuar, cerrando en diciembre de 2013 con un valor de 63,65 dólares la acción, pero el futuro no concedió esa suerte al pájaro azul, y el precio de la acción sufrió una depreciación continúa hasta 2016, momento en el que la acción de la compañía estaba valorada en 16,3 dólares.
En los próximos años parecía que la red social iba a levantar cabeza, mejorando sus valores y obteniendo en el año 2019 un BPA de 1,73 dólares.
El principio del fin
La red social seguía siendo muy polémica, ya no a nivel financiero, si no a nivel político y social. El cese de Donald Trump, o la publicación de la redada que acabo con la vida de Osama Bin Laden habían puesto a la red social en el punto de mira.
Y ya llegamos al año 2022, el día 4 de abril, Elon Musk anuncia la compra del 9,2% de las acciones de la compañía convirtiéndose en el mayor accionista. La partida de ajedrez acababa de comenzar para el sudafricano que el 25 de abril compra la compañía por 44.000 millones de dólares, de momento se verá si funciona mejor fuera del mercado, por ahora el resto es historia.