"Los departamentos no se hablan o lo hacen por conveniencia. Enviamos a los empleados a cursos de comunicación pero no es insuficiente, falta voluntad de comunicar", asegura Reina. Añade que "no nos comunicamos entre las cuatro paredes de la empresa porque falta sentido de propósito, es decir, agarrarse a algo que dé sentido a nuestro trabajo", explica el experto. Es el famoso ¿qué hago en esta empresa?, ¿qué me une al resto de departamentos?, etc.
La conclusión de Reina es que "si no hay sentido de propósito, no hay proyecto común, es decir, no hay motivos para que comuniquemos. El sentido de propósito hace a los equipos conscientes del valor que pueden aportar al negocio. Es el motor de cualquier organización".