Sólo 125.000 de los 3 millones de autónomos, 4 de cada 100, cobrarán las prestaciones de cese de actividad especial o cese de actividad extraordinario para autónomos de temporada que se pusieron en marcha el 1 de julio.
Son más de 250.000 autónomos a los que se les ha dejado atrás, sin poder abrir sus actividades y sin percibir la prestación por cese de actividad, según la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA).
Desde la organización consideran que se ha dejado atrás a 280.000 autónomos, que no han podido retomar la actividad desde el confinamiento ni cobrar la ayuda al no cumplir los altos requisitos que se les exigen.
Entre los impedimentos para percibir la prestación por cese de actividad especial puesta en marcha el 1 de julio está el de ser beneficiario de tarifa plana o algún tipo de reducción en cotizaciones; llevar menos de un año como autónomo o estar en pluriactividad.
Desde la asociación argumentan que son causas que han significado que muchos autónomos no soliciten esta prestación o se les haya denegado.
De este modo, Lorenzo Amor, presidente de ATA, afirma que "España no puede salir adelante con 280.000 autónomos aún cerrados desde el confinamiento, más de 1 millón en la cuerda floja y con caídas de actividad superior al 60%”.
Medidas de Emergencia
Según ATA, las medidas llevadas a cabo en relación a la prestación por cese de actividad son "ridículas". Afirman que hay la necesidad de "revisar el acuerdo, y tomar decisiones porque el contexto es diferente a cuando se plantearon las prestaciones, la demanda es muy baja, hay muchos autónomos que todavía no han abierto, y los rebrotes son una realidad".
Además, la asociación ya ha presentado un Plan de Emergencia para salvar autónomos, empresas y empleos con diez medidas urgentes que Gobierno y Administraciones deben impulsar ante la situación de deterioro económico por los rebrotes y restricciones sanitarias.