La Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) propone introducir un recargo extraordinario en el IRPF de manera temporal y hasta que se consigan equilibrar las cuentas públicas, después de que la crisis del coronavirus vaya a disparar el déficit público por encima del 10% del PIB según las estimaciones de distintos organismos. "Los coronatributos al IRPF son la medida más equitativa", asegura Jorge Onrubia, del Grupo de Trabajo Mixto Covid-19 de Fedea.
En el texto firmado por Onrubia, proponen una "reforma integral del sistema fiscal", que se diseñe "cuanto antes" y que debería ser fruto "de un amplio pacto entre las fuerzas políticas y los agentes sociales". "Es bastante ingenuo pensar que el gasto ingente se puede cubrir solo con la emisión de deuda", destaca.
Medidas temporales
"Si fuera preciso, su entrada en vigor podría ser gradual, según las exigencias que puedan derivarse del desempeño de las variables macroeconómicas", apuntan los expertos en el informe hecho público esta semana.
"Son medidas con límites temporales y estarían pensadas para entrar en vigor en 2021", puntualiza Onrubia en Capital, la Bolsa y la Vida.
En concreto, Fedea propone evaluar "de forma exhaustiva" y con criterios de "eciencia y efectividad" todos los benecios scales (exenciones, reducciones, deducciones, bonicaciones, tipos reducidos, etc.) que reducen el gravamen efectivo de los principales impuestos, como el IRPF, IVA e Impuesto sobre Sociedades.
"La eliminación de algunos de estos benecios podría generar un volumen importante de ingresos y contribuir a reducir las ineciencias asociadas con esos impuestos", destaca el documento.
Asimismo, Fedea asegura que también puede ser un "buen momento" para eliminar el régimen de estimación objetiva (conocido como tributación en módulos) de los rendimientos de actividades económicas en el IRPF y, en paralelo, el régimen simplificado del IVA, por lo que tributan muchos autónomos.