Asegura que tras analizar los discursos políticos de los dos candidatos a la presidencia de EEUU no esperan ningún impacto en el sector sanitario que pudiera perjudicarlos y por tanto “están tranquilos”. “Nuestra presencia en EEUU no va a cambiar sea cual sea el resultado electoral”, ha señalado Pascual.
Además ha analizado los resultados que ha presentado esta mañana la empresa. El grupo ha obtenido unos ingresos de 2.951 millones de euros, un 2,8% más que en los nueve primeros meses de 2015, con un beneficio neto de 406,1 millones de euros, un 1,1 por ciento más. Aunque el ebitda ha bajado un 1,6% hasta los 842 millones.
El margen sobre ebitda, una de las magnitudes que los inversores siguen más de cerca, se situó en el 28,6%, frente al 28,4% del segundo trimestre de 2016, mientras continúa sufriendo por unos menores ingresos en concepto de royalties y mayores costes de plasma por la apertura de nuevos centros de transfusión.
El grupo logró mejorar sus ingresos en su división de plasma, que condensa el grueso de su negocio con casi un 80% de las ventas, un 6,5% a 2.356 millones de euros.
Sin embargo, en la división de transfusiones, que arrastraba la renovación de un contrato con Abbott que penaliza los ingresos a corto plazo, acumula un descenso de los ingresos a septiembre del 4,6%, aunque en el tercer trimestre ha logrado un ligero repunte del 2,1%.