Los mercados asiáticos han cotizado mixtos, a pesar del cierre de Wall Street. En Corea del Sur, las caídas han sido de medio punto porcentual impulsadas por la agitación política que hay en el país, hoy se celebra el juicio político contra la presidenta por su posible presencia en un escándalo de tráfico de influencias.
En Japón, el Nikkei de Tokio ha cerrado con una subida del 1,3% en los 18.999 puntos. En el lado de las subidas, Nintendo con repuntes del 4%. Después de que la firma de análisis de datos Sensor Tower estime que la compañía podría recaudar con su juego Mario Run hasta 70 millones de dólares solo en su primer mes de venta, más de la mitad que el alcanzado por “Pokemon Go” en el mismo período de tiempo.
También Panasonic, según Financial Times, la japonesa está cambiando los móviles por las baterías para coger impulso. Los televisores, móviles y portátiles han dejado paso a nuevos productos como los componentes para el automóvil. Una fórmula para neutralizar el empuje de Apple, Google y Facebook.
Hoy lo más destacado ha estado en Hong Kong, el Hang Seng ha caído un 0,6%. Ha estado liderado por las compañías ligadas al juego. Las autoridades de Beijing están mirando de cerca esta industria con lupa en la región de Macau. El objetivo, detener la fuga de capitales. China limitará ahora a la mitad el límite de retiro de dinero en los cajeros automáticos de la Union Pay de Macau, para controlar las transacciones que realizan los jugadores. Y además se limitará también el monto de fichas que se cambian por dinero hasta un máximo diario de 5.000. Los títulos de Wynn Macau caen más de un 8%; los de Sands China el mismo porcentaje. Crown Resorts en Australia un 9%.
Una jornada en la que los precios del crudo han repuntado mirando a la reunión de los productores de petróleo de mañana en Viena.