El Tribunal Constitucional de Alemania ha declarado parcialmente contrario a la Constitución del país el programa del compra de bonos de deuda del Banco Central Europeo (BCE) puesto en marcha en 2015.
Según ha señalado el presidente del TC, Andreas Voßkuhle, al difundir la sentencia, el Gobierno y el Parlamento alemán no revisaron las decisiones del Consejo del BCE al respecto y por esa razón se incumplió la norma fundamental.
La decisión, que se tomó por una mayoría de 7 votos contra 1, indica que el programa del BCE rebasó sus competencias sin hacer consideraciones acerca de la proporcionalidad de la medida como herramienta para subir el índice de inflación a cerca del 2%.
La sentencia, sin embargo, no afecta el actual programa relacionado con la crisis del coronavirus.
Por otra parte, el TC rechazó la parte de la demanda que consideraba que con el programa de compra de bonos se violaba la prohibición de que el BCE financie a los estados miembros de la UE.
La decisión obliga al Gobierno alemán a interceder para que el BCE examine la proporcionalidad de la medida.
El presidente del tribunal admite que la sentencia puede "irritar" puesto que va en contra de una decisión anterior del Tribunal de Justicia Europeo.
Aludía así a la decisión del TJUE de diciembre de 2018, cuando esa institución de la UE sentenció que el programa de compra de bonos soberanos en los mercados secundarios del Banco Central Europeo no vulnera el Derecho comunitario.
El Bundesbank debe dejar de comprar bonos
El Bundesbank debe dejar de comprar bonos del gobierno bajo el esquema de estímulo a largo plazo del Banco Central Europeo en los próximos tres meses a menos que el BCE pueda probar que esas compras son necesarias, según ha dictaminado el Tribunal Constitucional de Alemania.
"El Bundesbank ya no puede participar en la aplicación y ejecución de las decisiones del BCE en cuestión, a menos que el Consejo de Gobierno del BCE adopte una nueva decisión que demuestre... que el PSPP no es desproporcionado a los efectos de la política económica y fiscal", dijeron los jueces.
Añadieron que el banco central alemán también debe vender los bonos ya comprados, aunque basados "en una estrategia - posiblemente a largo plazo - coordinada con el resto de la zona euro.
Con un volumen de bonos de casi 3 billones de euros desde 2015, el BCE ha confiado durante mucho tiempo en la compra de bonos para apoyar la economía a través de las crisis y la amenaza de deflación.
Los jueces señalan, sin embargo, que esta decisión no se aplica al último programa de lucha contra la pandemia del BCE, un plan de 750.000 millones de euros aprobado el mes pasado para apuntalar la economía.
El fallo alemán viene después de que el Tribunal de Justicia Europeo ya ha autorizado el esquema, argumentando que no constituye financiación ilegal y considera que las medidas del BCE son proporcionales.