Accionistas minoritarios del Popular, agrupados a través de la Asociación Española de Accionistas Minoritarios de Empresas Cotizadas (Aemec) y a través del despacho de abogados Cremades & Calvo Sotelo, han presentado ante la Fiscalía Anticorrupción de la Audiencia Nacional una demanda contra los gestores de la entidad bancaria, entre los que figuran su expresidente Emilio Saracho y el inversor mexicano Antonio del Valle.
La denuncia plantea dos líneas de investigación. Por un lado, la agrupación pide que se estudie si ha habido o no una "manipulación del precio de la acción" y, por otro, que analicen la administración que han llevado los gestores en los últimos meses.
Según la querella presentada por la agrupación, que seguirá las vías civil, penal y mercantil, los gestores del banco tenían un plan "perfectamente urdido", "destinado a la entrada en el capital social del Banco Popular y en su consejo de administración para depreciar maliciosamente y a su favor la cotización de las acciones mediante el filtrado de información".
En el lado de los accionistas minoritarios, Julio Delpie, poseedor de 160.000 títulos del Popular, afirmó que se han sentido "engañados" y que no se explican desde la plataforma de afectados cómo el banco ha pasado de ser uno de los "más rentables del mundo" a estar "quebrado", mientras aseguró que no han recibido ninguna notificación por parte del Santander. Otro accionista afirma que "jamás" pensaban que la entidad podría caer en bancarrota tras superar los test de estrés del BCE y con el ministro de Economía asegurando que era "solvente".