La bolsa española termina el mes de julio con una caída del 2,48%, reflejo de las múltiples incertidumbres que atenazan a los inversores, que también están recogiendo beneficios tras los buenos resultados del primer semestre.
A pesar de que hoy la calma ha vuelto al mercado tras la tempestad del martes gracias al freno en el desplome de la libra y la cautela propia a la vez, es la quinta jornada de descensos consecutivos para el Ibex, penalizado por los malos resultados de títulos como Ence o Viscofan.
El principal indicador del mercado español, el Ibex 35, ha caído en esta jornada 15,60 puntos, el 0,17%, y se sitúa en 8.971 puntos, incapaz de recuperar los 9.000 que perdió ayer. En lo que va de año avanza el 5,05%, menos de la mitad de lo que llegó a subir en Semana Santa.
Entre los elementos que han cotizado este mes destaca la evolución de las políticas monetarias en Estados Unidos -que podría bajar tipos hoy mismo- y Europa, que podría hacerlo en septiembre, con el consiguiente impacto en las divisas y en los valores bancarios; además de las dudas sobre el acuerdo comercial entre Estados Unidos y China o la posibilidad cada vez más cierta de un brexit sin acuerdo.
Los valores más castigados en julio han sido Ence, que pierde el 17% (tras caer en esta sesión un 11,08%), Mediaset cede el 16,77% mensual. Bankia, Siemens y Sabadell bajan un 13% y Enagás, Indra y y Acerinox se dejan el 12% cada uno. La mejor evolución ha sido la de Grifols, que se anota una ganancia del 12,69% desde finales de junio.
Durante esta jornada, el frenazo en los datos de PIB e IPC de la zona euro han desinglado el interés del bono alemán hasta un nuevo récord del -0,438% y por debajo de la tasa de facilidad de depósito del BCE. También hemos conocido cifras algo más negativas para la economía española.