Reflexionamos sobre el Comité de Ética de ILUNION VidaSénior
Palabras Mayores recibe hoy a diferentes profesionales de ILUNION VidaSénior para conocer los aspectos más relevantes de su Comité de Ética, y para entender por qué es una herramienta de primer orden al servicio de los profesionales del grupo.
Palabras Mayores recibe en Capital Radio a diferentes profesionales de Ilunion VidaSénior para conocer los aspectos más relevantes de su Comité de Ética.
Recibimos en el estudio a la responsable de sostenibilidad de ILUNION VidaSénior, Soledad Pavón y charlamos con la directora de ILUNION Calasparra y vicepresidenta del Comité de Ética del grupo, Ana Elena Zapata.
A ellas se suman la coordinadora de centros de día, Ana Carmen Sánchez, la directora del centro de día Arganzuela en Madrid, Noemí Gabriel; y dos usuarias de ese centro, Carmen y Pepa.
El Comité de Ética está formado por un total de 19 miembros, con expertos en Ética y un experto jurista, y también dos personas usuarias y un familiar, puestos de coordinación y responsables de oficinas centrales. Además de contar con representación de todas las categorías profesionales de los servicios que se ofrecen en los centros.
A este Comité llegan periódicamente, y en caso de urgencia si lo hubiera también, los dilemas éticos a los que se enfrentan los profesionales, no solo de los centros residenciales, sino también de los centros de día, y de los diferentes servicios de proximidad que ofrece ILUNION VidaSénior.
Tras 11 años de trayectoria, el Comité de Ética ha demostrado ser una herramienta útil tanto como órgano asesor de los servicios del grupo, como un instrumento más para facilitar el mejor cuidado, y así lo explica Pavón, reseñando que en este tiempo ha cambiado la naturaleza de los dilemas éticos a los que se enfrentan.
En esa misma línea se manifiesta Zapata, recordando que si bien los primeros dilemas tenían una relación directa con las sujeciones, “hoy tenemos otro tipo de dilemas diferentes, como por ejemplo, casos de renuncia a tratamientos, dieta o intervenciones. Nos encontramos con usuarios que renuncian a una dieta, a una dieta diabética o todos podemos recordar el último caso de un usuario que renunciaba a un tratamiento oncológico”.
Y, gracias a las usuarias del centro de día Arganzuela, Carmen y Pepa, hemos podido comprobar en directo cómo sus vidas han cambiado desde que acuden al centro y han interiorizado sus rutinas. Como ellas mismas aseguran, han ganado “autonomía, autoestima y alegría por vivir”.
