Cellnex funciona. Paradojas del mercado, subidas de tipos que no les son para tanto y negocios fuera de España que no les preocupan porque van bien. Esto es lo que dicen.
Sus cuentas hablan de pérdidas y entretanto no piensan ni en socios ni en ampliaciones de capital al tiempo que dispara los sueldos de sus directivos con la oposición de una junta dividida, prácticamente, por la mitad.
¿Hacia dónde mira la de torres de telefonía? ¿Peca de atender demasiado poco a la bolsa?
Escucha la historia completa en este podcast de Mercado Abierto:
La de torres de telefonía ha celebrado Junta General de Accionistas en la que ha aprobado, por la mínima, la subida de sueldos de sus directivos mientras dice no mirar a una cotización "frustrante"
Primera cita presencial con los periodistas y accionistas en dos años. Pandemia mediante a la de torres de telefonía desde el Auditorio del Museo Reina Sofía se le ha reprochado que sea una compañía española muy poco española aunque el asunto aquí es que Cellnex es española, nació como cotizada en 2015 tras la escisión de los negocios de torres de telefonía, de infraestructuras del sector, de Abertis y ahora mira al mundo.
A Alemania, Austria, Países Bajos o Francia. A Polonia, Dinamarca, Suecia o Reino Unido donde, por cierto, está a la espera de recibir el visto bueno de los operadores del mercado a la compra de las 24.600 torres de CK Hutchiston, aunque hay que aclarar que Cellnex es una empresa que no solo se dedica, dice Tobías Martínez, consejero delegado, a poner antenas. Hacen más, pero no explica el qué.
En sus últimas cuentas, que la empresa presentaba este pasado miércoles al cierre de la sesión del mercado el titular estaba en los ingresos de 828 millones de euros, pero se pasaba por alto, al menos en la letra grande (y verde) las pérdidas de 93 millones. Unos resultados que son aburridos por lo bueno que tienen.
Seguir endeudados
Viendo esto, Cellnex tiene clara una cosa. Tiene claro lo que no hace, pero por diversificar, nos dicen que no sabe hacia dónde pueden ir. Quieren crecer y para ello hay que gastar. El foco ahora lo tienen puesto en el 5G y las nuevas tecnologías y el ‘internet de las cosas’. Así...
Dicen no imaginarse sin ser intensiva en capital, es decir, sin acudir a compras y adquisiciones u operaciones con inversiones a largo plazo con recompensas en el frente de aquí a cinco décadas vista y con las que seguir creciente de la mano de la factura.
Una deuda que no deja de crecer, por otro lado, con inversiones que pesan y que hacen que las cuentas nunca salgan sobre el positivo aunque ellos insistan y quieran hacerlo.
En este apartado seguirá creciendo, al menos, no nos dicen los contrario, aunque hay un pero, por un futuro clima de subidas de tipos que ya se descuenta por parte del mercado para el verano no se preocupan porque el 87% de la deuda está refinanciada a tipo fijo, no depende de los vaivenes del Banco Central Europeo porque su refinanciación actual les sale más barata que hace un lustro por la mejora del negocio. Dicen: la posición de Cellnex respecto a hace cinco o siete años es mucho mejor.
Frentes pendientes
Cellnex tiene frentes. El alemán es uno de ellos y las compras de las torres de Deutsche Telekom por las que compiten con American Towers (líder del mercado) y por las que, a pesar del interés en el mercado, no están dispuestos a apostar a cualquier precio.
También le hemos preguntado a los directivos por el proceso de concentración en el mercado de la telefonía española a raíz de la fusión que preparan Orange y MásMóvil. Una realidad que deja sobre la mesa una paradoja con más empresas de torres que a las que ofrecer servicios.
Un proceso por el que se habla de un “error en el Excel”, hay una compañía (se apunta a Telefónica) con dos ‘torreras’ en cartera.
Guerra e inflación, una preocupación, un elemento que altera a un mercado al que Cellnex habla a las claras hablando de una “invasión” rusa de Ucrania. Tanques que están haciendo rebotar a los precios, impulsando una inflación que destruye a la economía desde dentro.
La bolsa frustra
Hoy se ha criticado que la estrategia de Cellnex por crecimiento en bolsa no está teniendo los frutos esperados y eso frustra. Le pasa a Bertrand Kan, el que es presidente del consejo de administración. Aunque claro nadie está contento con la cotización del título en el mercado a pesar de que para Cellnex ha sido especialmente negativo por las caídas de doble dígito desde que comenzara el año. La pantalla no lo es todo,
Y si alguien quiere dividendo, que venda.
A Cellnex le gustaría hacer más, pero si no se puede virgencita, virgencita, dice su consejero delegado, que me quede como estoy.