Han tenido que pasar 52 años para que el CES de Las Vegas se abra a la lujuria y al pecado que inundan sus calles. La polémica en 2019 con Lora Dicarlo ha abierto las puertas a los juguetes sexuales y entre los stands de la feria se ha colado una startup sevillana.
Con un nombre difícil de recordar para un español, MyHixel, Patricia López, sevillana de 36 años, recibe expertos de la industria y curiosos con una sonrisa. “Todos llegan entre risas y luego se van”, apunta López.
Eso también les ha ocurrido a la hora de sacar adelante su aventura empresarial. A pesar de tratarse de “un producto médico”, recuerda López, y así ya lo ha certificado la FDA estadounidense, MyHixel sigue encontrando dificultades para crecer en el mercado. “Nuestra finalidad no es el placer sexual, sino ofrecer una alternativa terapéutica para tener mejor salud sexual”.
Ahora llevan vendidos más de un millar de productos y “han firmado con un gran distribuidor para empezar en la costa este de Estados Unidos” donde ya son un producto sanitario.
Lleva ya tres rondas de financiación. En las dos primeras se apoyó en familiares, amigos y conocidos. Tres aventuras con los inversores que les ha valido alcanzar los 2 millones de euros en valoración.
A la hora de buscar financiación también han encontrado serios problemas, "a los inversores les llama la atención el producto, pero luego les da miedo explicar por qué invierten en ello", asegura la emprendedora española.
Investigación médica
Tras cuatro años de trabajo en una empresa del sector erótico, López inició su aventura emprendedora que ha acabado en el CES este 2020. "Me di cuenta que los hombres buscan muchísimo en internet cómo mejorar su rendimiento sexual". Este es el germen de MyHixel, un gadget de diseño contra la eyaculación precoz que se ha hecho un hueco en Estados Unidos.
Un viaje en el que ha llegado tras mucha investigación médica y con la ayuda de Jesús Rodríguez, director del Instituto Sexológico Murciano. "Precisamente él llevaba en aquel entonces tres años investigando sobre una metodología de control de control eyaculatorio a través de un protocolo de actividades y ejercicios".
MyHixel "es hardware y software", asegura Patricia López. El gadget sexual es una réplica de una vagina que vibra y "que está preparada para simular la temperatura corporal y que la experiencia sea más real".
Por otro lado, MyHixel cuenta con una app disponible para iOS y Android que sirve como agenda para marcar todos los hitos marcados por profesionales para tratar la eyaculación precoz.
La app permite contabilizar la duración del entrenamiento y observar las mejoras con el paso del tiempo. "Hemos conseguido que los usuarios los pacientes multipliquen por 7 la duración de la relación", asegura López. "Pero todo depende de lo que entrenes", añade.