Verónica Fumanal, autora de "El poder de la influencia", ha pasado por los micrófonos de El Balance para abordar el liderazgo político. Asegura que es cambiante y duda de que "los líderes de hace cincuenta años pudieran ser líderes ahora". Anteriormente, el liderazgo se asociaba con capacidades innatas. Por tanto, nace. Sin embargo, hoy, se considera "un fenómeno social que emerge cuando un líder tiene unas cualidades que, en una coyuntura y para un grupo de gente, son importantes".

Cajón de Sastre

En el Cajón de Sastre, Federico Quevedo entrevista a Verónica Fumanal, autora del libro "El poder de la influencia" para hablar sobre liderazgo político

Para Fumanal, el reconocimiento de un líder pasa por "compartir una forma de ver el mundo". Aunque, en la actualidad, todo es efímero: "la nueva medida del tiempo es el instante, por lo que nuestra necesidad de que algo nos llame la atención es muy cambiante". Históricamente, el liderazgo se ha asociado con los hombres pero "con la incorporación de la mujer al mercado laboral, aparecen los liderazgos femeninos".

Uno de los conceptos que se relaciona con el liderazgo es el carisma. "Ser carismático no te convierte en líder pero, cuando se habla de carisma, sí se habla de liderazgo". Fumanal asegura que el carisma es difícil de definir. Al igual que la belleza. Por otro lado, advierte de que no solo los políticos son líderes. También lo son los empresarios u otras personalidades reconocidas: "Amancio Ortega o Rafael Nadal son líderes sociales porque influencian a la gente".

Duelo de liderazgos

¿Quién es más líder: el rey Felipe VI o la reina Letizia? Para Fumanal, cada uno tiene su público. "Felipe es una figura reconocida en ámbitos de la monarquía tradicional y Letizia llega a unos públicos que no son monárquicos". Por ello, considera que "ambos son un buen equipo".

Entre Sánchez y Feijóo, Fumanal asegura que la respuesta depende del votante pero que "Sánchez ha conseguido trascender el perímetro del PSOE tradicional, llegando a los electorados, incluso, de ERC y Bildu".

La nueva política

Fumanal indica que "las redes sociales construyen liderazgos pero de una forma muy efímera, como se puede ver en Podemos". Considera que la clave de los partidos tradicionales es el arraigo territorial. "Las identidades políticas puede tener unos suelos y unos techos pero, con estructura territorial, se aguanta infinitamente mejor".