Miriam González Durántez, presidenta de España Mejor, ha pasado por los micrófonos de "Ni blanco ni negro" para abordar el Código Ético del Gobierno. Asegura que "tiene que centrarse en los políticos, en quienes tienen poder y están la cúspide porque tienen más responsabilidad y han de marcar el tono ético del país".

Ni blanco ni negro

En Ni Blanco ni Negro de El Balance, Fernando Jáuregui de la mano de Federico Quevedo entrevistan a Miriam González Durántez, presidenta de España Mejor, para hablar sobre el Código Ético del Gobierno

El Código Ético no existe en España. "Hubo un intento con Jordi Sevilla en 2005 pero se derogó durante el gobierno de Mariano Rajoy". La presidenta de España Mejor asegura que el Código Ético "toca conflictos de interés, relaciones con el parlamento y los medios de comunicación, asesores, nombramientos, uso de recursos públicos y transparencia".

Durántez también pone el foco en el Sistema de Integridad de la Administración General del Estado. "Es un instrumento farragoso y que se aplica a toda la Administración, por lo que pone las mismas obligaciones a un funcionario de a pie que a quienes están en el gobierno.

Según Durántez, "cuando hablamos de conflictos de interés, hablamos de cómo influyen los intereses de quienes tienen el poder, o de sus familiares y amigos, en el ejercicio del poder público". La presidenta de España Mejor añade que la ley de conflicto de interés presenta debilidades: "la ausencia de los conflictos aparentes, las excepciones que tenemos cuando se definen las relaciones profesionales de quienes son familiares de los políticos y que no tenemos el foco puesto en los sistemas de prevención de conflictos".

Durántez critica que no tenemos sistemas básicos que existen en otros sitios. "Los controles y las garantías al poder es otro de nuestros grandes agujeros y nunca nos hemos puesto con intensidad a ello". Incide en que solo hay una fórmula para "aumentar el listón de la ética": "los códigos hay que insertarlos en la sociedad para que funcionen y se conozcan claramente".

El quid de la cuestión

Para la presidenta de España Mejor, un asunto relevante son los instrumentos autorreglamentarios. "A la sociedad le gustaría poner a alguien por encima del presidente pero no se puede porque es el depositario de la soberanía popular. Para activar la exigencia social, contemplamos la figura del asesor independiente y de la oficina de ética específica para el gobierno".

Durántez también aboga por revisar el sistema de anticorrupción de manera integral. En particular, "algunos de los principios, como el enriquecimiento, que no es necesariamente tuyo, sino que es para cosas que indirectamente te van a llegar. Eso tiene que estar tipificado". Añade que apuesta por limitar el número de mandatos del presidente. "Creo mucho en las limitaciones del poder público".