La capital francesa alojará los Juegos Olímpicos en su XXXIII edición, tras haber sido el escenario del Roland Garros, una de las joyas de la corona del tenis mundial. Pero, ¿Cuáles son las cifras que se mueven en París gracias al negocio del sector del deporte?
Escuche el podcast en Capital Deportivo con Pedro Díaz y Yasmina Durán:
Con Roland Garros y los próximos Juegos Olímpicos, la capital francesa se corona como el escaparate del deporte.
Con un Roland Garros mejor pagado para sus jugadores que los anteriores y un Rafa Nadal con un futuro incierto dentro de las pistas de tenis, París ha vuelto a reunir a miles de aficionados de la raqueta, que no han escatimado a la hora de gastar.
Y , aunque de los cuatro grand slams del calendario, este es el que menos capital genera, su impacto en las arcas de la Federación es evidente: el 80% de su negocio lo genera el Abierto de Francia. La Copa de los Mosqueteros factura un total de 332 millones de dólares al año, con unos precios entradas en pista central que parten de los 60 dólares en última categoría, y más de 326 dólares para la final.
Unos Juegos Olímpicos algo distintos
En cuanto a la próxima cita de la ciudad de la luz, los Juegos Olímpicos, no son pocas las polémicas que los envuelven. Con un contexto geopolítico complicado, la XXXIII edición de los Juegos Olímpicos tendrá lugar entre los próximos 26 de julio y 11 de agosto.
El pasado diciembre, el Comité Olímpico Internacional dio a conocer "estrictas condiciones de elegibilidad" para que deportistas rusos y bielorrusos puedan participar como neutrales en los Juegos Olímpicos de París, una medida en aras de garantizar unos juegos pacíficos en medio del conflicto.
Otro problema que salpica estos juegos, es la huelga de controladores aéreos que hay actualmente en el país galo y que amenaza el correcto funcionamiento del transporte aéreo del país en puertas de las Olimpiadas.
No son pocos los retos que París afronta en esta edición de las Olimpiadas, una edición, que sin duda saldrá rentable si todo va según lo esperado.