Domingo, 6.30 de la mañana y en el invierno austral, las calles del barrio de Belgrano de la capital de Argentina estaban atascadas por la cantidad de vehículos como si de un día laboral, en “la furiosa" ciudad de Buenos Aires, se tratase.
Algunos rayos de luz comenzaban a iluminar las calles porteñas dejando ver a grupos de amigos y familias que caminaban bajo la gélida mañana para llegar al punto de salida de la Media Maratón de Buenos Aires.
Se acercaba la hora del pistoletazo de salida. En Argentina se madruga más que en España, 7.30 de la mañana es el horario de la carrera, sin importar si es invierno o verano. Aquí si te gusta correr, ¡toca madrugar!
Se respiraba mucho ambiente runner. La Avenida Figueroa Alcorta, muy cerca del estadio de fútbol de River Plate, estaba invadida de nervios, ansiedad, felicidad. Algunos corredores esperaban ese disparo de salida haciendo una entrada en calor, otros se sacaban fotos… Desde el puente montado para la prensa a escasos metros del arco de salida se podía observar caras de alegría, pero también de mucho sueño.
El reloj marcó las 7.30, y la carrera comenzó, en punto. Cerca de 21.000 almas daban los primeros pasos en zapatillas para disfrutar de uno de los eventos deportivos más emblemáticos de Argentina, que este 2018 hizo récord histórico en el país con el registro más bajo en la distancia de 21 kilómetros: 59 minutos-48 segundos.
Los participantes recorrieron los principales puntos turísticos de Buenos Aires: Casa Rosada (Casa de Gobierno), Avenida 9 de Julio, Obelisco, Teatro Colón, Planetario, Facultad de Derecho de la Ciudad de Buenos Aires, entre otros. Bandas musicales en diferentes puntos animaron a los corredores. Familiares y amigos esperaban a los laterales de la calzada central de la carrera. Turistas curiosos se acercaban a las vallas para sacar una foto y dar un grito de ánimo.
Mientras algunos corredores iban por los primeros 10 kilómetros, en meta estaban llegando los corredores de elite, quienes hicieron récord en el atletismo argentino de bajar de una hora el medio maratón.
Fue el etíope Mosinet Geremew quien cruzó el arco de meta en 59 minutos 48 segundos, seguido del keniata Bedan Karoki y en tercer lugar, Lawrence Cherono. Las mujeres también lograron el récord en esta distancia, bajando de 70 minutos. Jerono Kiplagat lo hizo en 1.09.07. En segundo lugar, cruzó la línea de meta Jerotich Kibarus y Chesang Kakuri en tercer puesto.
En una de las pruebas con mayor convocatoria a nivel Sudamericano, el tercer tiempo (como lo llaman en Argentina al post carrera) es tan importante como el evento deportivo. A pesar de la fría mañana de invierno, se podían observar carpas (estilo stand de feria del corredor) con familiares, amigos, profesionales del deporte, quienes esperaban a los corredores con un mate calentito (bebida tradicional de Argentina y muchos países de Sudamérica), con bizcochos caseros, fruta, agua. En vez de acabar la carrera e ir a un bar a tomar cervezas, el tercer tiempo en Argentina es beber mate y hablar entre ellos sobre lo sucedido en esos 21 kilómetros.
Un ambiente familiar, cercano, multicultural (participaron en la carrera ciudadanos de Brasil, Uruguay, Chile, Bolivia, Colombia, Venezuela, Ecuador, Perú, como también del continente europeo, asiático y africano), que contagiaba alegría a cada persona que pasaba por el lugar, fuera corredor o no.
Buenos Aires se vistió de ambiente runner, Buenos Aires el 26 de Agosto de 2018 logró el récord nacional y sudamericano. Y A Tu Ritmo estuvo presente disfrutando de la gran fiesta del running Argentino.
Un Medio Maratón de Buenos Aires de récord
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