Un informe desvela que el nacionalismo catalán busca aprovechar la crisis del coronavirus para avanzar en su proyecto independentista. Se trata de una investigación realizada por Nicolás de Pedro miembro del Institute for Statecraft, que concluye que los líderes independentistas han creado un ecosistema de medios paralelo al del resto de España para difundir su discurso.
Como consecuencia de ello se ha creado una comunidad informativa propia en Cataluña en la que se aprovecha "una circunstancia tan desafortunada como la del coronavirus para ejercer un agravio permanente" hacia el Gobierno de España, señala el investigador en Capital Radio.
Escucha la entrevista completa en el siguiente podcast.
Entrevista a Nicolás de Pedro, miembro del Institute for Statecraft
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Los mensajes que difunden los separatistas son simples: "la gravedad de la crisis del coronavirus es culpa de Madrid, a España no le importa que mueran catalanes, si fuéramos independientes habrían menos muertos".
Uno de los ejemplos más visibles es la entrevista de Quim Torra a la BBC, que tiene el objetivo de "internacionalizar el conflicto catalán". "Se busca pasar así de un conflicto interno entre catalanes a una cuestión entre Cataluña y España concebidas como dos entidades ajenas y que precisan de mediación internacional por unos supuestos déficits democráticos del Estado español", arroja el informe.
Un público impermeable a otras narrativas
Sin embargo, el problema no es tanto el discurso sino quiénes lo reciben. Se trata de una audiencia doméstica de simpatía nacionalista que suele informarse a través de los medios locales utilizados por el independentismo para difundir su mensaje. "Se crean unas comunidades muy compactas, donde difícilmente penetran otras narrativas. Otros mensajes no les llegan o les llegan muy filtrados", apunta De Pedro.
Esta cámara de eco que se genera a raíz de la desinformación tiene sus consecuencias. "Cuanto más separadas unas comunidades de otras, la convivencia puede ser más precaria", comenta el investigador. Es decir, si el contexto se mantiene, en los próximos años se podría agudizar el conflicto.