Tras el corte de suministro de gas a Polonia y Bulgaria por parte de Rusia, la UE ha contraatacado con una nueva batería de sanciones económicas al Kremlin.
Entre ellas, después de mucho insistir en recortar su dependencia energética con el país, Bruselas vetará el petróleo ruso en la UE.
Quiere hacerlo antes de que acabe el año, pero ¿cuáles son los plazos reales con lo que se cuentan para llevar a cabo esta medida? ¿Cuál será el impacto económico para ambas partes?
Escucha el análisis completo a continuación:
Bruselas ha anunciado un nuevo paquete de sanciones a Rusia entre las que se incluye el fin de las compras de petróleo en seis meses
"Los precios de la energía seguirán elevados, incluso aumentarán" Lazard Frères Gestion
Las multimillonarias meteduras de pata en la historia de la bolsa
A finales de año, la UE debería haber cortado su dependencia de petróleo con Rusia por completo. Al menos, según los cálculos de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen.
"Hoy abordamos nuestra dependencia del petróleo ruso. Seamos claros: no será fácil porque algunos Estados miembros dependen en gran medida del petróleo ruso", ha señalado.
Una decisión que entra dentro de la última y sexta tanda de batería de medidas para sancionar a Rusia por su ataque a Ucrania.
El veto supone la prohibición total de importación de todo el petróleo ruso, por mar y por oleoducto, crudo y refinado.
Si afinamos los tiempos, seis meses es lo que tiene Bruselas para llevar a cabo su maniobra que pondrá contra las cuerdas a Rusia, si tenemos en cuenta que el país de Putin ingresó en el último ejercicio la cantidad de 74.000 millones de euros por ventas de petróleo a la UE.
Cortar las negociaciones de crudo con Rusia se podrían hacer en dos meses
Pero ¿es posible que la UE se despida de manera definitiva del crudo ruso en el plazo de seis meses?
El catedrático en Economía, Miguel Córdoba, considera que "es un plazo razonable". "las relaciones con Arabia Saudí no son malas y hay varios productores , como Irán, Venezuela...".
Según el Centro de Investigación sobre Energía y Aire Limpio, la Unión Europea ha comprado más de 52.000 millones de euros en productos energéticos a Rusia desde la invasión de Ucrania. La mayor parte de gas y más de 20.000 millones destinados al petróleo.
Aun así, el experto en energía y profesor de la Universidad Europea, Roberto Gómez -Calvet, cree que se podría acabar esta relación incluso en el plazo de dos meses.
"Hay infraestructuras y barcos que pueden abastecer de petróleo a Europa", asegura Gómez-Calvet.
Hungría y Eslovaquia piden cautela
Pero hay excepciones y limitaciones….hablamos de Hungría y Eslovaquia. Estos dos países, dada su elevada dependencia de esta materia prima con el Kremlin tendrían un año más, es decir, hasta diciembre de 2023.
Aunque Eslovaquia va más allá y pide tres años para dejar de importar petróleo ruso, algo que por otro lado, estiman les cueste 160 millones de euros.
El ministro de Economía eslovaco, Richard Sulik, ha pedido que no se comparen las peticiones eslovacas con las húngaras, mientras que desde otros países, como República Checa, señalan que será necesaria una fase de dos o incluso tres años antes para poder construir nuevos oleoductos
De hecho, el portavoz del gobierno húngaro, Zoltan Kovacs, ya ha señalado que los planes de Bruselas no les convencen mucho y tampoco ven garantías energéticas en las sanciones.
"En el caso de Hungría hay que destacar además que se trata de un gobierno bastante prorruso", destaca Córdoba.
Consecuencias bilaterales
Otra cosa será el gas, aquí habrá mayores complicaciones. Eso sí, habrá consecuencias y las habrá para ambos lados.
Por un lado, Rusia- a pesar de que tiene a China y a India que podrían hacer el efecto sustitución a Europa- sufrirá el impacto, si tenemos en cuenta que la mayor parte de las exportaciones rusas son de hidrocarburos y a Europa.
Por otro lado, el Viejo Continente probablemente tendrá que enfrentarse a precios más elevados del crudo si quitamos a Rusia como uno de sus productores….tan sencillo como ley de oferta y demanda.