Alemania va a la guerra con tal de salvar su economía. No, no se alarmen, el país germano está lejos de llamar a sus reservistas. En realidad, se trata de un giro en su industria. Tradicionalmente, el automóvil ha sido la joya de la corona de la manufactura del país, especialmente escenificada en la marca Volkswagen. La competencia china, la crisis del sector en Europa, la migración de la industria, el envejecimiento de la población o la falta de innovación han lastrado al automóvil, y a la economía alemana en general.
Después de dos ejercicios de recesión, se ha abierto una ventana de oportunidad para Alemania: El rearme de Europa.
Las empresas del sector del país son las más beneficiadas del incremento de gasto en Defensa que ha anunciado Europa
Las compañías del sector lo celebran
El principal fabricante de municiones de Europa, Rheinmetall, ha anunciado que reutilizará dos plantas de fabricación de automóviles para desarrollar su actividad. Sus acciones repuntan un 16% en lo que llevamos de semana.
Hensoldt, que fabrica los sistemas de radas que utiliza Ucrania, está en conversaciones para contratar a 200 trabajadores de los principales proveedores de piezas de automóviles de Bosch y Continental. Rebota casi un 30% en las tres sesiones de esta semana.