Para diseñar bien nuestro patrimonio es fundamental hacer un balance holístico. Es decir, integrar no sólo los activos y pasivos financieros, sino también los activos y pasivos humanos.

"El dinero que vamos a ganar de aquí a nuestra jubilación es un valor humano potencial, es parte de nuestro activo total", explica Antonio Horcajo, gestor senior multi-activo global de KBL España, quien nos explica en el siguiente podcast cómo planificar nuestro patrimonio y qué cuatro principales riesgos debemos tener en cuenta. 



Al activo humano (el dinero que ganaremos a lo largo de nuestra vida) debemos restarle el coste futuro que afrontaremos a lo largo de los años. "Debemos ser conscientes del largo plazo, de dónde vamos a estar y cómo vamos a afrontar nuestras necesidades financieras", señala el gestor.

Cuando uno es muy joven, su capital humano es gigantesco, pero dispone de muy poco capital financiero. Una persona a punto de jubilarse, sin embargo, está en su pico de activo financiero "porque ha generado suficiente ahorro pero muy poco capital humano, y esto es fundamental de cara a la planificación patrimonial", explica Horcajo.

Desde KBL nos recuerdan que debemos tener en cuenta cuatro riesgos asociados a la planificación:

  • Riesgo salarial: perder el trabajo.

  • Muerte prematura: accidente, enfermedad.

  • Riesgo de longevidad: sobrevivir tus activos.

  • Riesgo de propiedad: metemos el dinero en el ladrillo, es un riesgo.