La inversión socialmente responsable ya no es una moda. Los fondos de inversión con criterios éticos atraen un riesgo-retorno más atractivo que en otras inversiones y ya se comportan mejor en rentabilidad que aquellos sin criterios éticos.

"Ya no es una tendencia o una idea vaga, realmente evitas riesgos, no sólo capturas oportunidades", señala Amparo Ruiz Campo, country head España y Latam de Degroof Petercam Asset Management, quien junto a expertos de BBVA AM, Santander AM, Amundi y AFS Finance nos relata la importancia de los criterios éticos para mejorar la rentabilidad de nuestra cartera. 



Uno de los principales impulsores de esta tendencia de inversión es el inversor millennial. "Para el millennial, la pela no es la pela y por eso se aleja de las inversiones sin criterios éticos", es una de las conclusiones del debate.

Los criterios ISR (inversión socialmente responsable) o ESG (Environmental, social y gobierno) tienen como objetivo generar un impacto positivo tanto a nivel social como medioambiental. Son criterios extrafinancieros que aportan valor en las tomas de decisiones y ayudan a gestionar con visión y horizonte a largo plazo. "Descubre oportunidades y refleja riesgos que no san los números financieros", señala David García Rubio, responsable de ISR de Santander AM, visión que comparten  Alberto Estévez, responsable de ISR de BBVA AM y Jorge Díaz, responsable de ventas institucionales de Amundi Iberia.