El panorama de la renta fija en 2025 está siendo particularmente desafiante, marcado por una volatilidad inesperada y cambios de tendencia notables, especialmente en el mercado estadounidense. Así lo destacan Guillermo Viñuales y Andrés López, gestores del fondo UBS Renta Fija 0-5, quienes compartieron su visión sobre el comportamiento de este activo en lo que va de año.
"Está siendo un año muy complicado, con más volatilidad de la que pensábamos al principio", señala Viñuales, quien recuerda que este periodo de turbulencias se suma a años anteriores ya marcados por grandes cambios en políticas monetarias y fiscales. Las recientes decisiones de la administración Trump respecto a aranceles y la política fiscal más laxa en Europa, particularmente en Alemania, han generado importantes movimientos en los tipos de interés.
Escucha la entrevista completa de Guillermo Viñuales y Andrés López en Mercado Abierto, con Lucía Martín:
Guillermo Viñuales y Andrés López, gestores del UBS Renta Fija 0-5, analizan el impacto de la política de Trump y las tensiones comerciales en el mercado de bonos.
El fondo UBS Renta Fija 0-5, que puede seleccionar emisiones en el rango entre cero y cinco años, mantiene actualmente una duración media de cartera entre tres y tres años y medio. López destaca la importancia de la flexibilidad: "Es un mandato flexible y más que nunca en un entorno tan cambiante y tan complejo como el actual, tener esa flexibilidad en términos de duración y de crédito te hace adaptarte en cada momento al escenario actual".
Estrategia actual: prudencia en duraciones y foco en la parte corta-media
Ante este panorama, los gestores mantienen duraciones intermedias (3-3,5 años) para balancear oportunidades y riesgos. "No queremos tener ni muy poca duración para, en caso de que haya un rally en tipos, coger esa ganancia de capital, pero tampoco queremos tener una sensibilidad muy alta a los tipos de interés", explica Viñuales.
El equipo concentra su exposición en la parte corta-media de la curva (hasta 4-5 años), más ligada a las bajadas de tipos de los bancos centrales, y muestra cautela con las duraciones largas, especialmente en Estados Unidos, debido a las incertidumbres sobre la política fiscal de Trump y cómo se financiarán los déficits.
López sugiere que el mercado de bonos podría estar marcando límites a las políticas de Trump: "La semana que más sufrió precisamente la curva americana con ese sell off, aquel miércoles Trump salió a anunciar la tregua de 90 días en los aranceles. Parece que hay más sensibilidad en el mercado de bonos que en el mercado de equity".
Composición de cartera: predominio del crédito y sector financiero
El fondo mantiene aproximadamente un 10-12% en deuda pública, concentrada en países periféricos europeos como España e Italia, aprovechando la mejor situación macroeconómica española dentro de la eurozona. El resto está invertido en crédito privado, con aproximadamente la mitad en deuda senior y un 30-35% en deuda subordinada.
Por sectores, los gestores mantienen una sobreponderación en el sector financiero. "El sector financiero por sus características es con diferencia el que más emite, un peso de en torno al 35-40%. Pero nosotros además pensamos que todavía los fundamentales, las métricas de crédito de los bancos siguen estando muy fuertes".