Tesla podría cargar sus pilas también con Samsung. La surcoreana podría convertirse en la próxima proveedora de baterías de la compañía de Elon Musk, según distintas fuentes.
Esto supondría el fin del dominio de Panasonic, hasta ahora único fabricante de baterías de Tesla. La decisión respondería a la elevada demanda del nuevo Model 3. Recordemos que el objetivo inicial de Tesla era producir 500.000 vehículos en el año 2020, pero el pasado mes de abril Elon Musk anunció que adelantaba dos años la fecha, a 2018. Tesla ahora lleva 373.000 pedidos de su Model 3 y ya ha dicho que las entregas comenzarán a finales del año que viene.
Sin embargo, el propio Elon Musk se ha encargado de desmentir la inmediatez por Tweeter, quizás para preservar el acuerdo con Panasonic.
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¿Qué ocurre? Que con un solo fabricante no tiene suficiente para cumplir su objetivo en la fecha prometida. Y es por ello que ya el mes pasado inició conversaciones con otros proveedores como LG Chem, Samsung y SK Innovation. Aunque en un principio las expectativas apuntaban a que LG sería la ganadora, gracias a sus plazos de entrega y la competitividad de sus productos, parece que quien ha tomado ahora las riendas es Samsung. Además, con el aumento de las ventas de vehículos eléctricos, Tesla espera diversificar sus proveedores para reducir los riegos.
Un lote de baterías de Samsung ha llegado ya a la base de desarrollo de Tesla en California. El volumen es considerable para tratarse de un proyecto piloto, así que podría tratarse más bien de una última prueba antes de la adopción definitiva.
