Ryanair ha presentado este lunes unos beneficios de 1.371 millones de euros en el semestre marzo-septiembre y bate su anterior récord histórico, que databa de 2017, gracias al incremento del tráfico aéreo y al aumento de los precios. Pese a ello, se ha quedado ligeramente por debajo de los 1.385 millones de euros previstos por la compañía irlandesa.
Michael O'Leary, director ejecutivo de la aerolínea irlandesa, prevé un fuerte crecimiento en los próximos tres años, siempre que los precios del petróleo se mantengan estables. "Esperamos que estos sólidos fundamentos sigan apuntalando un sólido crecimiento del tráfico y de las tarifas medias durante los próximos 18 meses", ha asegurado el directivo británico.
El directivo irlandés ha resaltado que la combinación del crecimiento del 15% del tráfico aéreo, junto a la subida del 14% de las tarifas "es algo nunca visto en el sector".
Espera un beneficio después de imupestos para todo el año fiscal que finaliza el 31 de marzo, de entre 1.000 y 1.200 millones de euros.
Récord de pasajeros
Ryanair ha batido su récord de pasajeros en el semestre marzo-septiembre: alrededor de 95 millones de pasajeros volaron con la aerolínea. Para la compañía, el factor clave para esta rápida recuperación ha sido mantener a sus pilotos y tripulación al día con sus horas de vuelo durante la pandemia.
La empresa de O'Leary ha aumentado su previsión de pasajeros para su año fiscal desde 166,5 millones a 168 millones, para superar ampliamente su récord anual de 149 millones de pasajeros transportados.
Sin embargo, el director ejecutivo de Ryanair se ha mostrado preocupado por que el suministro de Boeing sea insuficiente de cara al próximo verano y no entregue los 51 aviones demandados por la aerolínea irlandesa.