La compañía dice que va por el buen camino para cumplir sus metas anuales. Asegura estar bien posicionada para conseguir los objetivos de 2016, que progresa hacia sus objetivos a largo plazo a la vez que mejora el objetivo de ahorros para este año a 1.400 desde los 1.100 millones de euros. El director financiero de Repsol, Miguel Martínez, apunta a que se rebaja de 3.900 millones a 3.500 millones de euros la previsión de inversión para este año.

El directivo apunta a que seguirá avanzando en su programa de desinversiones e irá cerrando algunas operaciones pendientes. Respecto al dólar, Martínez ve en 6,97 dólares por barril la media para el margen de refino en el conjunto de este año frente a los 5,10 dólares en el tercer trimestre.

En cuanto al dividendo, Repsol no espera volver a la política regular de dividendos y recompras de acciones hasta que el rating se mantenga estable en nivel de triple B. Martínez,  subrayó que la política de dividendo para 2016 "estará en línea" con el del ejercicio 2015, que asciende a un total de 0,76 euros por acción. Por último, Martínez ha insistido en la que empresa no descarta emitir más bonos híbridos, para reforzar su estructura de capital, pero que solo lo hará si ve oportunidades.


Resultados

En cuanto a resultados, la compañía compensa debilidad del mercado del crudo con control de costes para cerrar el tercer trimestre con una deuda inferior a los 10.000 millones. El beneficio neto ajustado a extraordinarios alcanza los 307 millones de euros, casi el doble que un año antes.

Repsol bate las previsiones del mercado con un crecimiento del beneficio neto ajustado del 93% en el tercer trimestre, hasta los 307 millones de euros frente a los 159 millones de un año antes. La petrolera explica que se debe a unos mayores esfuerzos en el control de costes, que compensan la evolución del área de upstream (exploración y producción) y unos menores márgenes de refino.

Además, reduce la deuda neta en casi 2.000 millones de euros a finales de septiembre tras vender un 10% de su participación en Gas Natural, hasta situarla en 9.988 millones.

En los nueve primeros meses del año, el resultado neto ajustado de Repsol alcanza los 1.224 millones de euros. Supone una caída del 13%, respecto a los 1.399 millones obtenidos entre enero y septiembre de 2015, cuando "se incluían resultados financieros excepcionales de 500 millones de euros, derivados básicamente de la posición en dólares que tenía la compañía tras cobrar la expropiación de YPF".

Por líneas de negocio, en el acumulado del año el resultado neto ajustado de upstream alcanza los 35 millones de euros, frente a las pérdidas de 633 millones de 2015. El negocio de downstream (refino y regasificación) logra un neto ajustado de 1.329 millones, un descenso del 19,7% anual.