La firma de hipotecas acumula meses de fuertes descensos, afectada por la crisis del coronavirus. Unas caídas que impactan de lleno en el negocio de los bancos, por lo que las entidades están teniendo que agudizar el ingenio y tirar de creatividad para atraer clientes.
En este entorno se mueve Pibank, que ha decidido lanzar al mercado la primera hipoteca que no se empieza a pagar hasta pasados seis meses de la firma de la misma.
En una nueva entrega de First Movers, Inés Muñoz Vidal invita a Begoña Martínez, Directora General de Pibank Móvil, para hablar de esta nueva hipoteca:
En una nueva entrega de First Movers, hablamos con Begoña Martínez, Directora General de Pibank Móvil, sobre la nueva hipoteca del banco que no se paga hasta pasados seis meses de su firma
- ¿El renacer de un imperio? Playboy planea retornar a bolsa próximamente
- Telefónica: "Contamos con Huawei en el despliegue del 5G"
Se trata de un producto inédito en el sector bancario español. El periodo de carencia total es de seis meses y durante ese tiempo no se cobrará la cuota de cada mes, ni el principal ni los intereses.
Según explica Martínez, poner al cliente en el centro de su estrategia como banco está en su ADN y siempre acompañan sus pasos de investigaciones con clientes. Y en esas investigaciones "hemos entendido que la búsqueda de casa y conseguir una hipoteca es un proceso que genera ilusión pero también mucho estrés".
Es un proceso que además conlleva varios gastos, no solo la parte que no cubre la hipoteca, también otros gastos burocráticos, para formalizar la compraventa. "Para ayudar a que los clientes vuelvan a tener ese colchón en forma de ahorro, la hipoteca Pibank ofrece esa carencia total de cuota" y además se alargan seis meses el plazo de cada préstamo, para que no tenga impacto posterior en la cuota.
El reto de la digitalización: acompañar al cliente
Pibank también ha trabajado a la hora de digitalizar los procesos bancarios e hipotecarios. "El mayor reto es que el cliente se sienta acompañado en esa digitalización". Por ello ofrecen soporte a través de correo electrónico, WhatsApp y cinco oficinas físicas en varias ciudades españolas.
A pesar de ser una banca que ofrece soluciones online, no tiene solo un perfil joven. Martínez explica que la media de edad de los clientes es de unos 42 años.