Morgan Stanley estima que en 2035 el 7% de la población en EEUU consumirá fármacos para perder peso. Entre ellos, el Wegovy de Novo Nordisk o el Mounjaro de Eli Lilly, tratamientos ligados a la diabetes en muchas ocasiones. El problema es que estos compuestas quitan el apetito y el consumidor en tratamiento compra menos. El resultado es que la industria para adelgazar pone en jaque al sector de la alimentación.
Podcast con Luis Vicente Muñoz y Laura Blanco:
Los tratamientos para perder peso ponen en riesgo los hábitos de compra en el supermercado
Luis de Guindos contrataría una hipoteca a tipo fijo
Novo Nordisk, la acción de moda
Este verano de 2023 se producía el hito: la farmacéutica Novo Nordisk superaba a LVMH como valor de mayor capitalización en la bolsa europea. Detrás, el furor por perder peso. y su tratamiento Wegovy. La clave, que este compuesto reduce el riesgo cardíaco.
Con la ayuda de las redes sociales, Wegovy se ha convertido en uno de los tratamientos más populares para la pérdida de peso en EEUU, donde lo recomiendan hasta las celebrities.
Más de 650 millones de adultos en todo el mundo son obesos, más del triple que en 1975. Y aproximadamente otros 1.300 millones tienen sobrepeso, lo que exacerba condiciones como enfermedades cardíacas y diabetes, según la Organización Mundial de la Salud.
La inyección semanal con Wegovy hace que los pacientes se sientan saciados durante más tiempo y ayuda a una pérdida de peso promedio de alrededor del 15 % cuando se combina con cambios en la dieta y el ejercicio.
Grandes farmaceúticas mundiales como Pfizer o Amgen trabajan en terapias para bajar de peso similares a Wegovy. La esperanza es obtener una porción de un mercado que se estima que tendrá un valor de hasta 100.000 millones de dólares para finales de esta década. Barclays incluso señala que en la próxima década, el segmento de medicamentos para bajar de peso puede alcanzar un valor de 200.000 millones de dólares.
