Nokia reduce las perspectivas de ganancias para este año y el siguiente debido al endurecimiento de la competencia y por el aumento de sus inversiones en tecnología 5G. Esto ha provocado que las acciones de la empresa cayeran un 21% a 3,72 euros esta mañana y un 30% en total en lo que va de año.
La compañía de telecomunicaciones finlandesa Nokia ha registrado una pérdida neta atribuida de 557 millones de euros en los nueve primeros meses del año. Esto supone un aumento del 4,5% respecto a los números rojos registrados en el mismo periodo de 2018, según ha informado la empresa de telecomunicaciones este mismo jueves.
Lucha por el 5G
La compañía se ha visto obligada a pausar los pagos de dividendos para aumentar las inversiones en 5G y ha dicho que los reanudará cuando alcance los 2 mil millones de euros de caja: "La intensidad competitiva ha aumentado en algunas cuentas, ya que algunos competidores buscan participar en la etapa inicial del 5G".
El informe de Nokia contrasta con el de rival Eicsson, que la semana pasada superó sus expectativas de ganancias trimestrales y elevó su pronóstico de este año. Esta compañía afirmó que la demanda de redes 5G súper rápidas estaba despegando a una velocidad mayor de lo que se esperaba.
Previsiones de cara a los dos próximos años
La empresa especializada en redes de telecomunicaciones abandona el objetivo de aumentar su cuota de mercado en 2019 y 2020 y ha reducido sus proyecciones de beneficios por acción.
En concreto, para el año 2019 prevé un beneficio de 0,21 euros, frente a la última estimación que se situaba entre los 0,25 y 0,29. Además de un margen operativo de un 8,5%, inferior a los 9%-12% estimados anteriormente.
De cara al año 2020 la situación continúa igual. La empresa finlandesa rebaja su estimación de beneficio por acción de 0,37 y 0,42 a 0,25 euros y un margen de 9,5% frente a al 12%.