La marcha de Lionel Messi del Fútbol Club Barcelona tras veintiún años vistiendo la camiseta azulgrana podría hacer perder al club unos 137 millones por depreciación de marca. Este dato, publicado por la consultora Brand Finance, proviene de una pérdida de valor del 11% de los 1.266 millones en que está tasado el conglomerado culé.
La pérdida potencial se desglosa en 77 millones correspondientes a ingresos comerciales, 17 millones por los ingresos de cada partido y cada resultado en el terreno de juego, además de 43 millones en ventas de merchandising. De hecho, la falta del delantero argentino hará que se resienta cada eslabón de la cadena de valor del club, incluida la fortaleza de la marca del Barcelona, por una peor percepción por parte de fans y seguidores a nivel mundial.
El FC Barcelona es actualmente la segunda marca de clubes de fútbol más valiosa del mundo tras el Real Madrid, por una diferencia de tan solo 10 millones. En cambio, si con la salida de Messi el club azulgrana cae hasta los 1.129 millones, podría descender al tercer lugar por debajo del Manchester United, valorado en 1.130 millones.
Coyuntura de la partida
A pesar de todo, LaLiga sigue fiel a la normativa equitativa en cuanto a control económico que provoca que no se pueda quedar. Además, habría que tener en cuenta los problemas "económicos y estructurales" del club ya mencionados por el presidente Joan Laporta.
En la emotiva rueda de prensa del pasado domingo, el jugador explicaba que el contrato para renovar por cinco años estaba preparado encima de la mesa y que no hubo falsas esperanzas por parte del presidente. Sin embargo, por la hinchada deuda del club, y la normativa de LaLiga, fue materialmente imposible llevar a término la firma. "Yo me había bajado el 50% de mi ficha, habíamos cerrado el contrato. No había nada más. Se han dicho mentiras. Hice todo lo posible por quedarme", añade entre lágrimas el icónico delantero.
