Mercadona abre hoy en Burjassot (Valencia) su primer mostrador de raciones para llevar tras una investigación realizada durante un año. La cadena de supermercados da un paso más en su negocio alimentario y empieza a cocinar. La sección, llamada Listo para comer, ofrece comida recién hecha en raciones para llevar y supondrá un primer test para el desarrollo de esta nueva línea de negocio en el resto de supermercados.
El proyecto inicial, que comenzó hace un año, cuenta con un equipo de nueve personas, con formación en cocina y que proceden del personal de la propia cadena. El grupo lleva invertido un millón de euros en este tiempo, en el que ha dispuesto un laboratorio culinario para diseñar las recetas, determinar los métodos de elaboración y elegir la maquinaria adecuada, así como el diseño del espacio en los establecimientos.
La responsable del equipo, Mariló Gómez, explica que la idea de esta sección la dieron los propios clientes. "En la línea de cajas, cuando pasaban con los tuppers, nos decían que a ver cuándo teníamos comida recién hecha para llevar". La falta de tiempo para cocinar o la tendencia de llevarse la comida preparada al trabajo ha propiciado esta necesidad, según la cadena valenciana, que se une así a otras compañías del sector como Carrefour o Dia que ya ofrecen este servicio en muchos de sus supermercados.
El servicio
Mercadona quiere aportar valor a su propuesta y, para ello, la comida se elaborará en la tienda, aunque una parte del proceso esté ya lista -como la masa de las pizzas o las salsas para la pasta-. Además, algunas de las recetas se expondrán en el mostrador y se servirán por raciones -como costillas, albóndigas o paella-, mientras que otras se terminarán en el momento (como la cocción de la pasta) o se podrán personalizar (el cliente podrá elegir qué ingredientes quiere en su pizza).