Línea Directa cumple un año en el mercado. La aseguradora de Bankinter anda sin pena ni gloria entre unos inversores que no parece recompensar el trabajo de una firma que ha cambiado de cúpula y hasta de cara publicitaria. Ingresos que caen y una acción errática.
¿Cuál es el futuro que le espera al recién evolucionado como Grupo Línea Directa Aseguradora?
Escucha la historia completa en este podcast de Mercado Abierto:
La aseguradora escindida de Bankinter cumple años en el Continuo sin pena ni gloria y ansias de crecer entre cambios de cúpula y caras publicitarias
Ya cuando salieron al mercado, cuando el 17,4% del capital de Línea Directa comenzó a moverse al libre albedrío entre las manos de los inversores Carlos Rodríguez, el que es director financiero de la escisión del negocio de seguros de Bankinter nos decía aquí, en Mercado Abierto, en Capital Radio, que todo forma parte de una estrategia natural.
Citaba la teoría de la evolución y siendo los primeros de la clase tocaban la campana desde el parqué del Palacio de La Bolsa de Madrid a un precio de 1,318 euros el 29 de abril de 2021.
Era un jueves en el que según arrancó la negociación de los títulos el rebote era del 29% aunque el entusiasmo, poco a poco, se fue aminorando hasta que al viernes siguiente, a las 24 horas, el rebote apenas era del 7% (siete puntos porcentuales) y el precio del título se quedaba sobre el 1,41€/acción.
Movimientos tal día como hoy de hace 12 meses que se explicaban con cotizaciones como las reflejadas y que hoy andan algo por debajo de estas métricas; es más nos comenta Ignacio Sebastián de Erice que el recorrido que la firma tiene por delante, de momento, sigue siendo escaso aunque en algunos casos lo peor, asegura José Lizán, gestor en Quadriga Funds, ya ha pasado.
¿Saldrá adelante?
Bien es verdad que tampoco hay que echar los fuegos artificiales porque despegar el título, no creen los expertos que es lo que vaya a hacer, pero no se pueden esperar movimientos bruscos de la acción en el mercado a la espera de lo que pueda llegar de frente en los meses de recuperación económica (condicionada por la guerra en Ucrania) que quedan, a esta hora, por delante.
Hasta ahora complicado es la palabra que puede definir un entorno de mercado desafiante para Línea Directa. Una aseguradora que, así las cosas no lo ha hecho mal y, de hecho, mejor que su competencia directa. Fíjense sino en los comportamientos más que negativos del resto de aseguradoras en el mercado español.
No ha sido un año alcista ni positivo para la firma, según Víctor Galán, analista de Planeta Bolsa a pesar de que el sector en el que opera está de mejoría y que ellos podrían alcanzar, en bolsa, métricas históricas sobre el 1,5€/acción.
Cambios en la cúpula
Durante su primer año de cotizada en esta firma han habido cambios. Primero, en la cúpula directiva. El pasado 17 de febrero y tras 27 años en la compañía, Miguel Ángel Merino pasaba el testigo a Patricia Ayuela que pasaba a convertirse en consejera delegada, siendo la cuarta en ocupar el cargo y levantando el trofeo de alcanzar el máximo puesto de dirección de una sociedad bursátil como mujer.
Cargo que asumió ni siquiera una semana antes de que arrancara una guerra en Ucrania como la lanzada por Rusia el pasado 24 de febrero y a la que ahora debe sortear entre subidas de precios desproporcionadas e históricas sin réplica en las últimas cuatro décadas.
En la propiedad de la firma también ha habido cierta réplica del terremoto. Hace un año Bankinter repartió el 82,6% de Línea Directa entre sus accionistas, dejando como primer inversor a Jaime Botín, a través de su sociedad Cartival, con un 19,15%, mientras que Bankinter retuvo un 17,4% y Fernando Masaveu, un 4,37% aunque ahora supera el 5% clonando a la entidad naranja.
De hecho, en este último caso, los Masaveu han acumulado en apenas un año alrededor del 0,7% del capital de la aseguradora con compras a mercado. En 52 semanas a Grupo Línea Directa Aseguradora le han empezado a seguir ocho casas de análisis. De ellas, el 50% (cuatro) recomienda comprar mientras que el 37,5% (tres), mantener en cartera, y el 12,5% (uno), vender.
En cuanto al precio objetivo, el de consenso está en 1,76 euros, lo que supone un potencial de revalorización del 26,6%. Los más optimistas con la compañía aseguradora son los expertos de Berenberg que tienen la valoración a 12 meses en 2,06 euros.
El atractivo de la escisión sigue estando en su dividendo. Una prioridad en su ADN. Que se dará al compañía del sector que más dividendo reparte. A cuenta de los resultados de 2022 en los que la compañía obtuvo un beneficio neto de más de 24 millones de euros el próximo 8 de junio se repartirán 0,020 euros brutos por acción, es decir, casi 22 millones de euros a repartir entre los accionistas que con este ya será el quinto pago que realiza desde que saliera al mercado.
Matías Prats abandona
365 días en los que el reputado periodista Matias Prats ha dejado de ser la cara visible de una publicidad que ahora encarna un “personaje anónimo” tras dirimirse en las que urnas de los clientes con otros personajes públicos como Monica Carrillo o Carlos Latre.
¿Y con esto qué hacemos?
El objetivo, como es todos los casos, no puede ser otro que el de seguir creciendo y desde la compañía nos dicen: pretendemos estar en la Champions League; esto, traducido a nuestro lenguaje bursátil de cada día no es más que alcanzar la meta del IBEX 35.