Indra y los sindicatos han llegado a un acuerdo sobre el procedimiento de reorganización laboral de su filial Indra Soluciones Tecnológicas de la Información (ISTI).
La compañía ha reducido el ERE inicial propuesto de 1.036 trabajadores a un número máximo final de 580 empleados.
La compañía, además, ha confirmado que se producirá un "ajuste salarial para un colectivo de empleados con salarios notablemente superiores a la media de su rol o actividad, como medida para la conservación del empleo, medida que afectará a un máximo de 100 empleados.
Por otro lado, Indra se ha comprometido a poner en marcha mecanismos de protección a los empleados cercanos a la edad de jubilación, así como los de colectivos "más vulnerables o merecedores de un tratamiento más favorable para la conservación del empleo".
220 despidos en forma de prejubilaciones
De los 580 despidos que se producirán, 220 serían prejubilaciones a partir de los 57 años, con una prestación correspondiente al 80 % del salario fijo bruto, mientras que los otros 360 se corresponderán a extinciones de contrato con una indemnización en función de los años trabajados.
La filial tecnológica de Indra anunció en junio un plan estratégico para superar "las dificultades generadas por los cambios estructurales de los sectores" en los que tiene presencia la compañía.
A finales de octubre, Indra presentó resultados económicos acumulados hasta septiembre, con unas pérdidas de 31 millones de euros, frente a los beneficios de 64,7 millones que registró hace un año.
Los ingresos de la división de Tecnologías de la Información de la compañía en los 9M20 cayeron un -4,2% reportado, desde los 1.412 millones de euros de los nueve primeros meses del presente año a los 1.473 millones del mismo período del 2.019.