En medio de las adversidades y de la crisis, hay emprendedores que están encontrando oportunidades y construyendo interesantes proyectos a contracorriente. Aquí, en Espacio Leyton, los identificamos y hablamos con esas personas que están creando, a través de la innovación, un futuro mejor al servicio de la sociedad. Hoy contamos con Joan Caba, director de Iclotet, una firma de ingeniería industrial.
Joan Caba compró Iclotet hace dos años. Hoy tiene 80 empleados en Mollerusa y ha creado una filial comercial en Estados Unidos.
La empresa tiene una visión a largo plazo, entre cinco y diez años, y Caba afirma que “las turbulencias provocadas por la pandemia no le han hecho cambiar el ritmo”.
De hecho, Iclotet ha estado trabajando sectores esenciales, muy relacionados con la alimentación, por lo que la crisis de la COVID-19, realmente, ha sido un tiempo de mayor demanda y actividad para la compañía.
Transporte aéreo en la distribución de neumáticos
Ahora, Iclotet está trabajando en almacenes aéreos automáticos para el transporte de neumáticos. Caba explica que la tecnología se basa en “transportes aéreos para colgar elementos”.
La compañía identificó un nicho de mercado creciente dentro del sector textil, que “para poder tener sistemas de mucha reacción para mucho volumen de pedidos, estaban transicionando desde almacenes en los que se agrupaban cajas o palés hacia almacenes en los que se llevaban los elementos colgados, lo que otorgaba flexibilidad para preparar los pedidos”.
El sistema de Iclotet está pensado para elementos pesados, por ello se centraron en el transporte no de ropa, sino de neumáticos. Al igual que en la industria textil, “el sistema no está automatizado, utiliza muchísimas referencias con muchos pedidos de cantidades muy pequeñas, y está creciendo mucho la venta por internet”.
Por ello, la empresa ha apostado por aplicar la tecnología de transporte aéreo a la distribución de neumáticos.
Parking automático de bicicletas en el mobiliario urbano
Otro de los proyectos de Iclotet se centra en el parking automático de bicicletas integrado en el mobiliario urbano de las ciudades.
Joan Caba explica que “utilizando también la tecnología de poder coger la bicicleta, colgarla y levantarla… detectamos que podíamos ser una solución innovadora a la saturación del espacio público dentro de las ciudades”.
Para garantizar el uso de la bicicleta, debe de haber muchas estaciones distribuidas por la ciudad en las que aparcar los vehículos. Hoy en día, la solución está en las barras fijas, pero su seguridad es baja y dan imagen de desorden.
La idea es levantar las bicicletas a un piso superior a través del mecanismo de Iclotet para así crear “una gran de densidad de estaciones, de no mucho volumen, a lo largo de la ciudad”.
Además, también tienen previsto que se puedan hacer reservas para estacionar las bicicletas. Dentro del proyecto, la empresa está tratando también de aplicar sistemas pasivos de descontaminación del aire de las ciudades.
¿Con quién colabora Iclotet para llevar a cabo sus proyectos?
El director de Iclotet detalla que “la mayor parte de los recursos son internos, excepto las competencias que no tenemos. Por ejemplo, el parking de bicicletas tiene que estar integrado en el espacio urbano, por lo que se necesita a un gabinete de arquitectura para que sea agradable a la vista”.
Por otra parte, la compañía, a nivel tecnológico, también se ha apoyado en empresas de aplicaciones móviles.
En cuanto a financiación, Iclotet se ha apoyado en Leyton. De cara a entrar en el Cedeti, “los innovadores sabemos imaginar, pero nos cuesta más demostrar. Ahí nos ha ayudado mucho Leyton”.
La colaboración con Leyton se basa en “poder superar las barreras administrativas para lograr financiación para este tipo de proyectos, no solo a nivel Cedeti, sino también europeo”.
Ahora, Leyton e Iclotet se encuentran trabajando en los fondos Next Generation, pensados precisamente para la inversión.