Uber, Cabify, Taxis... La guerra por hacerse un hueco en el transporte de las ciudades españolas sigue abierta. Ya no solo entre los VTC y los taxis, sino también entre Uber y Cabify: todos contra todos.
Y es que la firma española ha adelantado por la derecha a la estadounidense, alcanzando la rentabilidad antes que ella.
En concreto, Cabify ha conseguido en el último trimestre de 2019 un beneficio operativo o Ebitda de 3 millones de dólares, con lo que es la primera en conseguir la rentabilidad, por delante de Uber, Lyft u otras del sector de movilidad como Emov.
Durante el mismo periodo Uber perdió 1.200 millones de dólares.
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En el conjunto de 2019, Cabify facturó 104 millones de dólares, un 11% más que en el ejercicio anterior. Mientras que la cifra bruta de facturación, que incorpora el coste de las carreras o viajes de sus coches, se elevó hasta los 704 millones de dólares.
Cabify nació en España en 2011 y ya opera además en 10 países de América Latina. Está valorada en 1.400 millones de dólares.
Uber se creó en 2009 en Estados Unidos y está presente en casi todo el mundo; opera en todos los países de América y tiene también presencia en cada continente. La compañía ha registrado pérdidas de unos 8.500 millones de dólares entre enero y diciembre de su año fiscal 2019.
Pero el consejero delegado de Uber ha dicho que sus planes avanzan más rápido de lo previsto y que el objetivo de conseguir un trimestre con beneficios se ha adelantado al último trimestre de 2020, aunque espera seguir registrando pérdidas en el conjunto del año.
La batalla de los taxis en los tribunales
Uber, Cabify y el taxi están enfrentados desde hace meses y han librado ya varias batallas en los tribunales. El último capítulo es que la Audiencia Nacional ha avalado la obligación que los vehículos de alquiler con conductor (VTC) tienen de emitir una "hoja de ruta" por cada uno de los servicios de transporte que realizan.
El sector del taxi ha celebrado esta decisión porque consideran que así se conseguirá que las VTC no puedan circular ni estacionar sin un servicio precontratado y refuerza así el tiempo de antelación en al menos 15 minutos, que solo está vigente en Barcelona.
Y es que el 2019 siguió aumentando el número de licencias de VTC, en un 26% hasta más de 16.500, mientras la cantidad de taxis ha continuado en descenso. Con ello, el ratio quedaba a cierre del año en un vehículo VTC por cada 3,85 taxis. El dato está lejos de la proporción de 1 a 30 que marca la ley.
