Nueva York, dos apartamentos y seis protagonistas. El 22 de septiembre de 1994, llegaba por primera vez a nuestras pantallas Friends, la serie que, aunque la hayamos visto un millón de veces y nos sepamos de memoria sus diálogos, no envejece.
Una historia que más allá de la televisión ha organizado todo un imperio, también económico, a través de las historias de un grupo de seis amigos. ¿Hasta dónde llega la estela del Central Perk?
Escucha la historia completa en este podcast de Mercado Abierto:
La sitcom cumple este 22 de septiembre 27 años con cuentas multimillonarias en el bolsillo y todo un imperio a sus espaldas
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Hoy se cumplen 27 años desde que Rachel, Monica, Phoebe, Joey, Chandler y Ross coincidían por primera vez en aquel Central Perk, un pequeño salón con un sofá en el centro que, siempre, estaba ocupado por esta pandilla de seis amigos que pretendían comerse el mundo desde Nueva York mientras que alrededor del globo millones de espectadores estaban atentos a sus historias.
Tiene 236 episodios, apenas uno menos que todos los capítulos combinados de Juego de tronos, House of Cards y Orange is the New Black. 236 episodios que no son de horas, en apenas 20 minutos cuentan lo que quieren y sin malabarismos.
Sobre un sofá de lo más austero se discutían los grandes debates que traen de cabeza a la humanidad: desde la teoría de la evolución sobre la que se enzarzaban Ross y Phoebe hasta las diferencias de clase en unos Estados Unidos que por aquellos años noventa andaban de cambio en cambio.
También se descubrían aquí los más oscuros secretos de la infancia de los protagonistas o se ponía en cuestión la inteligencia de algunos de los personajes.
27 años después...
Friends se transmitió por primera vez en Estados Unidos un día como hoy, pero de 1994, hace ahora 27 años. Estuvo en emisión más de una década en la que, cada semana, entre 25 y 30 millones de espectadores.
Friends es una serie muy fácil de ver. Pero en Friends, la premisa son los amigos. Y sus variopintas relaciones y, sobre todo, su ironía.
El tema musical de la serie no mentía: ellos realmente estaban ahí el uno para el otro, entre chistes y sin ellos. A The Rembrandt, la banda escogida para poner música a esta historia de grupo, le valió esta serie más de una alegría y 5 millones de dólares en regalías por un tema de apenas dos minutos y medio.
Fuente de oro
Friends esconde tras estas siete letras un negocio inagotable de más de 1.000 millones de beneficios al año.
Los salarios del sexteto protagonista, David Schwimmer, Jennifer Aniston, Courteney Cox, Lisa Kudrow, Matthew Perry y Matt LeBlanc, aumentaron en consecuencia. Si en la primera entrega cobraron 22.500 dólares por episodio, en la novena y la décima temporada se embolsaron un millón de dólares por capítulo, negociando sus renovaciones en bloque desde la tercera entrega.
A partir de la sexta comenzaron a percibir, asimismo, un 2% de los beneficios generados por las reemisiones de la serie, que hoy sigue siendo una mina.
Actualmente, Warner Bros ingresa unos 1.000 millones de dólares anuales por ceder los derechos de emisión de Friends en todo el mundo, lo que significa que cada uno de los intérpretes sigue ganando 20 millones de dólares gracias a la comedia.
Pero el negocio no es solo para Warner, también las plataformas del streaming, “a tortas” por hacerse con los derechos de la emisión gastan millones para “quedarse” con las historias de estos seis amigos.
El 1 de enero de 2015 Netflix comenzó a ofrecer todos los capítulos de la serie conquistando a una nueva generación, la Z. Según publicó The Wall Street Journal, Friends es la segunda serie más vista de la plataforma en Estados Unidos sólo por detrás de The Office.
Más concretamente, entre agosto de 2017 y julio de 2018, los usuarios de Netflix vieron 31.800 millones de minutos de la serie, mareante cifra que podemos simplificar a cerca de tres millones de capítulos al día y que supone el 4% del total de los visionados del servicio.
Para conservar la serie durante 2019 Netflix desembolsó 100 millones de dólares frente a los 30 millones anuales que venía pagando, perdiendo la exclusividad de la emisión en streaming.
Aunque a finales de año llegó HBO y para principios de 2020 ya eran ellos los que la tenían. Por eso pagaron 425 millones de dólares. AT&T también entró en la puja, pero termino retirándose de cualquier conversación.
El "remember"
Y hace un par de años, llegó “Friends: La Reunión” un episodio que no era tal, sino un “remember” de cómo vivieron los personajes aquellos 10 años de sus vidas.
Por estos 110 minutos que duró “la reunión” y acorde a los datos de un informe de Deadline, la suma total gastada en la recreación del set de rodaje y, sobre todo, en los sueldos de los protagonistas, alcanza los 20 millones de dólares.
Cada uno de los actores y actrices cobró entre 3 y 4 millones, a pesar de que la oferta original pasaba por apenas darles 1 millones de dólares, lo que cobraban por episodio cuando terminó la última temporada.
Y aquí hay un dato curioso, algo completamente insólito en Hollywood y muy rentable para ellos: siguen siendo los mejor pagados de la historia de la televisión.
Más allá de la pantalla
A eso hay que añadirle que tanto la NBC, la cadena que la emitió en Estados Unidos, como los propios actores todavía hoy reciben numerosos beneficios por la venta de merchandising, reemisiones en televisión y réditos de las ventas de los DVD.
Y precisamente lo que cabe resaltar es que el dinero que mueve Friends trasciende la pantalla.
Más allá del merchandising clásico, esto son tazas, libretas, camisetas en el que se haya estampado el logo de Friends, la firma de juguetes de construcción, Lego vende una réplica del Central Perk (el café de las reuniones), personajes y mobiliario incluidos, por algo menos de 60 dólares; la cadena de cafeterías Coffee Bean & Tea Leaf cuenta con una edición limitada de cafés y tés a 10 dólares el paquete; y la tienda de decoración Pottery Barn ha lanzado una colección donde destaca la mesa del boticario que dio nombre a un capítulo de la serie y cuyo precio ronda los 1.000 dólares.
Seis historias, seis amigos delante y detrás de las cámaras y una serie que traspasa la pantalla. Sin importar las veces que la veamos. Friends solo hay una. Y siempre, como reza su banda sonora, “siempre estará ahí”.