El sector turístico está muy preocupado por cómo vaya a evolucionar el plan de desescalada del Gobierno. Ya varios actores de este negocio han dicho que el plan presentado es inútil para reactivar el sector. Piden además un protocolo único para toda Europa.
En principio los pequeños comercios, las terrazas y los alojamientos turísticos, podrán abrir en la fase 1. Esto es, si todo va bien, para el 11 de mayo en la mayoría del territorio español. Pero el problema es que la movilidad se limita a la propia provincia.
Desde Exceltur ya ha dicho que entienden que no puede haber aglomeraciones y que se deben imponer algunas medidas de seguridad por razones sanitarios.
Pero con el plan del gobierno, que impide la movilidad entre provincias, no puede darse, dicen, una verdadera actividad turística. Tampoco les gusta la medida que prohíbe el uso de las zonas comunes.
La Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos, CEHAT, también critican que este plan no resuelve de qué forma se pueden abrir los hoteles.
Dicen que también entienden los condicionantes sanitarios. Pero creen que las restricciones de la movilidad a las personas, el sector no puede funcionar.
Piden medidas para proteger el empleo y a las empresas: prolongar los ERTE por fuerza mayor, la entrada en carencia de las operaciones financieras y trabajar para que haya protocolos de reapertura y que sean iguales en toda Europa, para poder recibir clientes internacionales. Que se les diga el cómo, más que el cuándo.
En ese protocolo único trabaja ya una mesa técnica dirigida por el Instituto de Calidad Turística de España (ICTE), en la que participa también CEHAT, el Instituto Tecnológico Hotelero (ITH) y la Secretaría de Estado de Turismo del Gobierno de España. El protocolo estará listo el próximo viernes, 8 de mayo y tendrá luego que aprobarse en el seno del Ministerio de Sanidad.
Pero sin movilidad entre provincias y con aforo limitado, hoteles y bares y restaurantes lo tienen por ahora bastante difícil. En verano de 2019, el sector de la hostelería y turismo dio empleo a unos 2 millones de personas.