EasyJet sale de los números rojos en la primera mitad de su año fiscal, tras obtener un beneficio neto de 5 millones de libras. Es una cifra dentro de la horquilla pronosticada por el mercado y que contrasta con las pérdidas de 41 millones del ejercicio anterior.

La aerolínea de vuelos low cost deja atrás trece años negros impulsada por la caída precio del combustible y los movimientos de las divisas, así como el buen final de la temporada de esquí. Así, entre enero y marzo EasyJet ha transportado 29 millones de pasajeros y aumentado un 3,8% sus ingresos.

A pesar de la mejora en su cuenta de resultados, la aerolínea señala que se ha enfrentado a un contexto más difícil en este periodo. El impacto de la huelga de controladores en Francia y el menor número de clientes han derivado en menores ingresos subyacentes. Tampoco han ayudado el descenso del comercio y el tiempo durante la Semana Santa.

EasyJet espera mejorar las ventas en el conjunto del año y un crecimiento del beneficio, tras volver a las ganancias en la temporada de invierno. La compañía prevé mantener precios competitivos frente a los operadores rivales, favorecida por el menor coste del petróleo.

Sin embargo, los analistas reducen sus pronósticos para reflejar los 25 millones de libras derivadas de la huelga en Francia en abril, que supuso la cancelación de 600 vuelos. Se estima que podría tener un beneficio antes de impuestos de 660 millones de libras en el año.

 

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