A veces a las cotizadas tampoco les 'salen las cuentas'. Suele ser un rara avis, pero estos fenómenos extraordinarios ocurren cada cierto tiempo. Eso sí, algunas veces con peores consecuencias que otros.
El último tiene que ver con Liberbank. La CNMV le habría corregido, según informa El Confidencial, una anotación por las comisiones que se llevó cuando Caser cambió de manos. Pero hay muchos más.
Te lo contamos en este podcast de Expediente Abierto.
De los 43 millones que se llevó Liberbank por los acuerdos de bancaseguros con Caser en 2020, el banco habría anotado ya 38 millones en sus cuentas de ese ejercicio cuando, según la CNMV, tendrían que haberse diferido en 10 años.
Ese simple error habría llevado a Liberbank a engordar su beneficio neto un 156% frente a lo que realmente ganó el año pasado. Es decir, desde los 16 millones que reconoce la CNMV hasta los 41 millones que finalmente anotó Liberbank.
Si echamos un ojo a la heremoteca reciente, el banco asturiano no es el único que ha cometido un error contable de entre las cotizadas. Algunos, más que errores, son retoques quizá hechos a conciencia.
Por ejemplo, ese podría ser el caso de lo que ocurrió con el Banco Popular. En 2018, un año después de que tuviera que ser adquirido por 1 euro por el Santander, la CNMV abrió expediente sancionador al Popular por mentir en sus cuentas de 2016.
Otro de los resultados que hacían sospechar al regulador de los mercados eran los de DIA de los ejercicios 2016 y 2017. Tanto, que la CNMV puso en cuestión a KPMG y al consejo de Dia por no detectar las irregularidades contables.
Luego está el caso de empresas que, como no ‘les salgan las cuentas’, directamente posponen su publicación durante más de un año. Es el caso de Abengoa, que publicó los resultados de 2019 en 2021.
Eso sí, hay casos donde simplemente se trata de errores contables sin muchas consecuencias o sin mala intención. Esto es lo que pasó con Inditex, cuando la CNMV le pidió que ampliara la información sobre seis aspectos distintos de sus cuentas de 2019. Sobre todo, el objetivo era ver cómo había calculado la textil el impacto de la nueva normativa sobre arrendamientos NIIF 16.
Aunque hay que recordar que errores, a veces (sobre todo, cuando se trata de cuentas de gigantes como estos y de millones de euros) los puede cometer cualquiera. Incluso la propia CNMV.
Tuvo que reconocer pequeños errores contables en sus propios resultados de los años 2011 y 2012. Lo que pasó fue que no contabilizó la prórroga del uso gratuito de un inmueble. El error correspondía al 1% de su beneficio en 2011: 121.700 euros.