Crédit Agricole alcanza un beneficio de 5.614 millones de euros en los nueve primeros meses del ejercicio. El grupo galo aumenta así un 35,1% su beneficio hasta septiembre con respecto al año anterior.


El banco francés ha indicado que parte del alza se explica porque el pasado ejercicio se vio afectado por "elementos específicos negativos importantes". En el caso de no incluir elementos no recurrentes, el incremento de los resultados ha sido del 15%.


El Ebitda de la compañía ha progresado un 15% hasta 8.610 millones de euros y los ingresos suben casi un 7% hasta más de 24.000 millones de euros.


En el tercer trimestre los beneficios subieron casi un 37%, hasta los 1.900 millones de euros. El Ebitda trimestral por su parte ha ascendido un 21,9% hasta 2.911 millones de euros y los ingresos aumentaron un 11,1% hasta 7.885 millones.


Pero si se descuentan los elementos específicos no recurrentes, disminuyen un 4.5%, lo que la entidad ha relacionado “principalmente por el alza de la tasa de imposición efectiva” al 29%, frente al 24% entre julio y septiembre del año anterior. Cuando el banco se benefició de operaciones con baja fiscalidad.


Crédit Agricole ha subrayado que su nivel de solvencia de máxima calidad es el 14,9%, que se encuentra entre los mejores del sector y cinco puntos por encima de las exigencias regulatorias.


En cualquier caso, los beneficios entre enero y septiembre son ya superiores a los obtenidos durante todo el año 2016.