¿Frenazo a la operación corporativa del año en el mercado español? Naturgy podría dejar en el dique seco Géminis. La mayor reestructuración en la historia de la energética se pierde en el horizonte. La escisión entre negocios regulados y liberalizados para simplificar y focalizar el trabajo parece que con la guerra en Ucrania y el actual entorno macroeconómico pierde sentido.
¿Está en peligro la bicefalia ideada por Francisco Reynés?
Escucha la historia completa en este podcast de Mercado Abierto:
Tras el asalto de IFM al consejo de administración, la heredera de Gas Natural Fenosa cree que no es el momento de llevar a cabo operaciones corporativas por la guerra en Ucrania
Naturgy quiere ser dos, pero no a cualquier precio. Crecer en la transición energética es el principio sobre el que opera la energética desde hace unos meses cuando se lanzó al mercado la idea de Géminis, esto es, escindir el grupo en dos cotizadas.
Una centrada en los negocios regulados, es decir, infraestructuras de gas y electricidad y por la otra parta dejar los liberalizados de generación y comercialización.
La primera de las compañías pasa por alcanzar unos objetivos a 2025 de más de 25 GW de capacidad de generación eléctrica instalada (14 GW en generación renovable y 11 GW de generación convencional), 11 millones de clientes, y una cartera diversificada de aproximadamente 290 TWh de aprovisionamientos de gas.
El otro grupo aglutinaría, sobre el papel, todos los negocios dedicados a la gestión de infraestructuras reguladas de distribución y transporte de energía. Con una base de activos única, de más de 155.000 km de redes de electricidad, 135.000 km de redes de gas y 16 millones de puntos de conexión, presente en 6 países
Dos nombres bajo una misma estructura y ambos en el IBEX. Una profunda reorganización para dar respuesta al mundo que se viene. Las preguntas, todavía hoy, siguen siendo muchas.
Oportunidad, opcionalidad y crecimiento son los tres pilares sobre los que se constituirá, a partir de hoy, Naturgy tras Géminis que nace para despejar las dudas sobre la energética, para acabar, dicen, con el “ruido” y las “especulaciones” tras la entrada de IFM en el consejo de administración.
Consejo dividido
Una vez recordamos a que nos enfrentamos, miramos a lo nuevo. Naturgy no sabe cómo seguir hacia delante. Asume que el proyecto de Géminis se puede retrasar unos meses o, incluso, hasta dejarlo en el dique seco por tiempo indefinido.
La semana pasada en el marco del Foro Económico de Davos y en una entrevista con Expansión, el presidente de la heredera de Gas Natural Fenosa, Francisco Reynés, reconoció que todos los planes podrían demorarse por no ser el momento adecuado para ponerlos en práctica.
“La decisión sobre el calendario está sujeta a condiciones de mercado, visibilidad regulatoria, autorizaciones y obtención de los ratings (calificaciones crediticias)”, decía Reynés.
Este mismo diario cuenta hoy que a nivel interno, Naturgy mantiene el calendario inicial para completar la operación este año o, como tarde, antes de marzo de 2023 porque si no luego no sabrían cómo iban a dar carpetazo a Géminis.
¿Por qué marzo?
Otra pregunta queda en el aire ahora. Les decía hace un rato que la clave está en aprobar toda la operación antes de marzo. ¿Y por qué? Pues porque conseguir las aprobaciones de los reguladores es complicado. El plan debe trabajar sobre los últimos resultados que se han auditado. En este caso serían los del primer trimestre de 2022.
Nos vamos más allá de febrero y entonces, para completar una auditoría nueva y recibir el visto bueno, habría que esperar mucho más tiempo.
Luego tenemos las calificaciones. Naturgy ya dijo en la presentación del Plan Géminis su intención de que tanto MarketsCo como NetworksCo tuvieran "investment grade", traducido esto es grado de inversión.
Para ser capaz de emitir y colocar deuda en el mercado una firma tiene que contar con una calificación BBB- o superior en la referencia de S&P o los equivalentes en Moody’s y Fitch. Tras el anuncio de Géminis, S&P, Fitch y Moody's, anunciaron que revaluarían la calificación de Naturgy, o sus dos grupos escindidos, a medida que se fueran conociendo "más detalles".
Es por esto por lo que Naturgy tiene que completar Géminis cuanto antes, pero por la guerra no les dejan. Porque dicen que darían a luz a dos nuevas formas corporativas en un entorno de mercado distorsionado y que eso, en el largo plazo, es un problema.
De momento, la bicefalia podría estar camino de la parálisis (temporal, nos dicen) y de hacer que las cosas, simplemente, se quede como estén. Otra derivada más de la guerra de Putin. Otra consecuencia de una guerra que nadie quiso.