Los unicornios son seres mitológicos, pero también es el nombre que asegura que una startup vale más de 1.000 millones. Los unicornios españoles son seres mitológicos, solo hay tres ejemplos documentados: Idealista, Cabify y Glovo. Llega el 2021, su año de la verdad.
Estas dos últimas encaran ya su segunda década de vida e inician un 2021 clave para su futuro. Ambas abren el ejercicio con un panorama bien distinto.
En el caso de Glovo, el delivery ha dejado en segundo lugar su problema con los famosos riders para vivir una auténtica explosión de la comida a domicilio derivada de la crisis de la Covid-19.
Las restricciones impuestas a la hostelería llevaron a un boom al sector. Un informe de la Fundación Alternativas calcula que estas empresas aportarán al PIB 2.277 millones.
En estos momentos, Glovo vive su particular edad dorada con acuerdos estratégicos. Desde cocineros con estrella Michelín hasta la Casa del Libro y sin olvidar a grandes empresas de España como Naturgy, Cepsa o DIA, entra otras).
Las sombras para la compañía de Óscar Pierre llegan de la legislación laboral y esa figura de los riders. La compañía tiene abierto un frente legal abierto con la 'ley rider'.
Lucha interna
Y la otra gran amenaza está en la lucha interna entre sus accionistas para hacerse con el poder de este jugoso negocio. Delivery Hero sigue sumando millones a sus arcas para hacerse con el control total de Glovo.
La firma alemana, realiza el mismo servicio que la española, pero en el país centroeuropeo, acaba de cerrar una ronda de financiación donde ha captado 1.300 millones de euros.
Así que, Delivery Hero ya tiene listos 2.700 millones para tomar el control total de uno de los unicornios españoles que quedan tras la venta de Idealista.
Según fuentes del mercado, la compañía con sede en Berlín podría tener ya el 40% del accionariado entre compras en el mercado secundario y la adquisición de las acciones de AmRest, que tenía el 7,5% de Glovo.
El papel de Alibaba
Ese creciente poder teutón en la compañía española no está gustando en el actual equipo directivo que busca contrarrestar ese aumento de influencia con otro gigante, pero, en este caso, del e-commerce: Alibaba.
Según adelanta La Información, en Glovo sondearon a varios accionistas minoritarios con la posibilidad de que Alibaba adquiriera los títulos a un precio ligeramente superior a los 42 euros que ofrecía el gigante alemán.
La ruta de Cabify
Más tormentoso parece el camino de Cabify. Si el sector del delivery vivió un boom en 2020, el de las VTC se desplomó por las restricciones de movilidad instauradas para detener el avance de la Covid-19.
Durante los meses más duros del confinamiento, la actividad de estas empresas cayó hasta un 80%. Pero, los problemas de Cabify son anteriores incluso a la llegada del SARS-CoV-2 a nuestras vidas.
Rakuten, uno de los principales accionistas de la española, busca apagar sus motores dentro de Cabify. La firma nipona entró en la compañía en 2015 y ha alcanzado casi el 50% del total del accionariado.
En sus sucesivas tomas de acciones, el brazo inversor de la firma prestó casi 36 millones de euros en dos créditos participativos a la filial española del grupo.
Sin embargo, a finales del pasado ejercicio convirtió los más de 33 millones de euros de deuda participativa que ofreció a la filial española hace varios años en dos líneas de crédito.
Una complicada situación financiera que, por ejemplo, le ha obligado a deshacer sus posiciones en Glovo, donde contaba con acciones valoradas en 50 millones de euros.
A ello se le suman los problemas laborales con expedientes de regulación temporal de empleo (ERTEs) en la mayoría de sus socios y más frentes judiciales.
En las próximas semanas se debería conocer el desenlace del arbitraje laboral que enfrenta a Auro New Transport Concept, su mayor socio en España, y a Cabify.